Cáceres dispone de 105 plazas públicas para acoger a refugiados de Ucrania

La organización Accem, con sede en Cáceres, centraliza todas las acciones de auxilio de refugiados en la ciudad, ya que es la encargada del acogimiento dentro del protocolo establecido por el Ministerio de Migraciones. Según informa la Junta de Extremadura, esta entidad gestiona un total de 50 plazas en el albergue municipal y 25 en otros espacios como hostales. A estas 75 plazas hay que sumar las 30 que ofrece la Diócesis de Coria-Cáceres en la sala Clavellina.

Según el Ayuntamiento, por ahora aún no se ha necesitado recurrir al albergue, ya que aún no se han cubierto el resto de las plazas que ofrece Accem. Estos días se están llevando a cabo tareas de acondicionamiento de este espacio, que lleva cerrado al público desde hace dos años. Se abrió durante la pandemia para dar acogida a personas sin hogar. Se han realizado reparaciones y ya hay agua caliente, se ha revisado la fontanería y se han renovado las 'alcachofas' de la ducha. También se han cambiado los fluorescentes fundidos y ayer se hizo la revisión para detectar brotes de legionella. Según explicó recientemente la concejala de Asuntos Sociales, María José Pulido, el albergue ofrece la posibilidad tanto de acogida temporal para personas que tengan otro punto de llegada como para las que necesiten una estancia más larga.

La sala Clavellina dispone de 30 habitaciones, salones, cocina y otras instalaciones para la acogida de los refugiados que lleguen a Cáceres, unas instalaciones que aún no se han tenido que utilizar, tal y como informa la Diócesis.

Aunque los refugiados ucranianos hayan llegado a Cáceres a través de iniciativas privadas y no requieran de alojamiento gestionado por Accem, esta organización sí puede encargarse de otros asuntos que les conciernen. Ofrecen programas de búsqueda de empleo, atención psicológica, y asesoramiento jurídico entre otros. La Diócesis, aparte de la acogida ofrece también acompañamiento de estas personas.

Recientemente Accem y otras entidades sociales que trabajan en la ciudad han llevado a cabo una reunión para trabajar sobre los protocolos de acogida. Fuentes del mundo de las organizaciones sociales de la ciudad indican que hay una mayoría de refugiados que están alojados en domicilios particulares de familiares y conocidos. Son fundamentalmente mujeres y niños, ya que los hombres de entre 18 y 60 años se han quedado combatiendo en la guerra. Estas fuentes indican que a la hora de registrarse las personas que llegan pueden hacerlo directamente en la brigada de Extranjería o también en las dependencias de Accem. La asistencia sanitaria y la escolarización de los menores está garantizada para todas las personas, independientemente de su origen o situación socioeconómica.

Mientras la ciudad se prepara para la acogida de refugiados ucranianos, las organizaciones continúan poniendo en marcha diferentes acciones solidarias. La cooperante cacereña Patricia Sierra, de la oenegé Sonrisas en Acción, participará este mes de abril en una expedición que llevará un camión con medicinas «muy específicas» para un hospital de Ucrania. Bomberos de Barcelona, un miembro del Ejército de Tierra y tres cooperantes van a participar en esta acción coordinada.