Rafael Moneo sitúa a Mérida como «origen» de su carrera

Moneo recibió este viernes la insignia de honor del Colegio de arquitectos de Extremadura (Coade), una tierra que lleva su firma en cinco obras. Además del citado edificio, al que en breve se sumará su anexo, también es el autor del refectorio del Monasterio de Guadalupe, de la Casa de la Cultura de Don Benito y de la sede de la Confederación del Guadiana, igualmente en Mérida.

En su discurso, el prestigioso arquitecto agradeció la distinción concedida por sus compañeros y recordó especialmente a dos personas: Dionisio Hernández Gil, «que creyó en mí para la obra del Museo Romano», y el exdirector del museo, José Álvarez Sáenz de Buruaga, a quien considera uno de los responsables de que los emeritenses tengan conciencia de que «el suelo que pisan es testigo de lo que ha sido su historia y su presente».

El Palacio de Congresos de Mérida ha sido escenario del acto institucional anual del Coade, en el que se entregan las insignias de oro, plata y honor, que reconocen la trayectoria de los profesionales de la arquitectura y su contribución a la transformación de la región.

En el caso de Rafael Moneo, el colegio destaca que es una figura de referencia mundial y además fue el primer español galardonado con el Premio Pritzker de Arquitectura. Su obra más emblemática en Extremadura, el Museo Nacional de Arte Romano de Mérida, «es un referente internacional por su diseño y su integración con el contexto arqueológico de la ciudad».

El Coade también distingue al Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida «por su papel clave en la conservación, investigación y difusión del legado arqueológico emeritense, integrando la arquitectura contemporánea en el diálogo con el patrimonio y promoviendo la participación ciudadana en su protección».

Esta insignia fue recogida por la consejera de Cultura de la Junta de Extremadura, Victoria Bazaga, quien recordó a los distintos directores que ha tenido el Consorcio de Mérida, con momentos buenos «y otros dificilísimos». Junto a esto, pidió a los arquitectos que sigan haciendo de la ciudad «el lugar donde hacer nuestro proyecto de vida».

El colegio otorga estas distinciones desde 2021. En ediciones anteriores se concedieron a la galerista Helga de Alvear, los restauradores Antonio Pérez y José Polo, la académica María del Mar Lozano Bartolozzi y el técnico de la Administración regional José Antonio Galván.

Además de las insignias de honor, se entregaron las distinciones por los 25 y 50 años de ejercicio profesional. Junto a esto, el acto supuso el relevo al frente del Coade con la toma de posesión de su nueva junta tras las elecciones celebradas este mes.

Manuel Cabalgante es el nuevo decano en sustitución de Juan Antonio Ortiz, quien ha dejado el cargo después de ocho años. En su discurso de despedida pidió a sus compañeros que no olviden «la pasión, la creatividad y el rigor en vuestro trabajo».