Crimen de Aldeanueva del Camino

El presunto asesino de María Varela recibe el alta hospitalaria e ingresa en la cárcel

Lo hizo la magistrada del número 5 tras tomarle declaración por videoconferencia, puesto que el detenido permanecía ingresado en el Hospital Virgen del Puerto de Plasencia desde el 27 de mayo. Los sanitarios que acudieron a la vivienda de Aldeanueva en la que tuvo lugar el crimen enviaron a Javier Gil al centro hospitalario para que fuera curado de las heridas que presentaba en el abdomen.

Lesiones que presuntamente se habría causado con el mismo cuchillo con el que asestó cinco cuchilladas a María por la espalda y otra por delante antes de tirarla por el balcón. Una de las heridas que presentaba Javier requirió que fuera intervenido quirúrgicamente y es el motivo por el que no ha sido hasta hoy cuando ha recibido el alta hospitalaria y ha sido posible su traslado a prisión.

Además de la medida cautelar de ingreso en prisión se ha acordado una orden de protección respecto al hijo de 14 años que tenía en común con la víctima. En esta resolución, la jueza hace constar la prohibición al detenido de comunicación o aproximación al menor a menos de 500 metros, así como la suspensión de la patria potestad.

Cabe recordar que el menor no estaba en la vivienda familiar, ubicada en la travesía de la N-630 al final del pueblo en dirección a Plasencia, cuando tuvo lugar la muerte de su madre. Esa mañana como cada día su padre le había llevado a la parada para que poco después de las ocho horas cogiera el autobús hasta el Instituto Valle del Ambroz, en Hervás, donde estudia.

Al regresar a casa, por motivos que se desconocen, Javier supuestamente cogió el cuchillo y acabó con la vida de María. Fueron dos peregrinos los primeros en dar el aviso sobre las 8.30 horas de esa mañana. Aunque no había denuncias previas por malos tratos y la víctima no estaba integrada en el sistema de seguimiento de violencia de género, el denominado VioGén, el caso se ha calificado como tal.

Según vecinos y familiares de la víctima, los más cercanos a ella estaban tratando de que rompiera de manera definitiva con una relación que la perjudicaba y que en más de una ocasión había intentado dejar. De hecho, hay quienes apuntan que la mañana en la que perdió la vida, María lo intentó también.

María y Javier, de 38 y 39 años respectivamente, eran novios desde la escuela. Ambos y sus familias son de Aldeanueva del Camino y es en el pueblo donde han permanecido siempre. Ninguno de los dos trabajaba en la actualidad y conformaban una pareja solitaria.