Nuevos hallazgos en la necrópolis tartésica de Medellín: cerámicas griegas del siglo V a. C.
Vuelven las excavaciones al «yacimiento protohistórico de referencia menos conocido de Extremadura», gracias a un convenio de la Junta, el Ayuntamiento y la Real Academia de Extremadura
Las excavaciones arqueológicas iniciadas en la Necrópolis tartésica 'El pozo' de Medellín tras cuarenta años desde la última campaña arrojan sus primeros resultados. Los trabajos que han comenzado este otoño han sacado a la luz fragmentos de cerámicas griegas de barniz negro, datadas a finales del siglo V a. C.
Esta nueva campaña de excavaciones se ha materializado en virtud de un convenio suscrito entre la Junta, la Real Academia de Extremadura de las Letras y las Artes y el Ayuntamiento de Medellín. La Junta aporta la financiación (245.000 euros en cuatro años), el Ayuntamiento gestiona los fondos y ejecuta el plan de actuaciones, y la Real Academia de Extremadura se encarga de la dirección científica de la intervención y del asesoramiento técnico. El objetivo del convenio es «referenciar de nuevo la necrópolis en el mapa de Medellín y de la cultura tartésica en Extremadura».
Tumbas entre parcelas agrícolas
Actualmente, quedan «in situ» más del 60% de las tumbas que componen la necrópolis de Medellín, algunas de ellas situadas en la zona nuclear del cementerio.
El yacimiento arqueológico se localiza en una zona de parcelas agrícolas próxima al Guadiana, al margen del conjunto histórico de la localidad, a más de un kilómetro del Cerro del Castillo.
Primeros trabajos en los años sesenta
Cinco campañas de excavación se han llevado a cabo en la zona desde que los arqueólogos fueron conscientes de su riqueza patrimonial en los años sesenta: 1969, 1970, 1982, 1985 y 1986. El profesor Martín Almagro-Gorbea ha estado al frente de esos trabajos a lo largo de varias décadas, y también ahora está en la nueva campaña -como asesor científico-, unos trabajos dirigidos por el arqueólogo José Ortega.
Kylix de Medellín
De momento entre los restos hallados en las excavaciones no abunda la cerámica griega llegada a la Península Ibérica fruto de las redes comerciales mediterráneas, pero hay que recordar que este enclave ha dado testimonios emblemáticos como el famoso Kylix de Medellín, la copa salida del taller del pintor ateniense Eucheiros, y localizada antes de empezar las excavaciones, a principios en los años sesenta. Ahora, el hallazgo de fragmentos cerámicos con barniz negro recuerda a ese famoso Kylix, una copa importada de Grecia que se recuperó en trozos al realizar un pozo de riego en la zona ocupada por la entonces desconocida necrópolis. Esta pieza que puede verse en el Museo Arqueológico Nacional está decorada con la imagen de Zeus lanzando rayos, con la inscripción 'Soy un hermoso vaso' y, en el otro, los cuartos traseros de un caballo.
Visita a la negrópolis
La directora general de Bibliotecas, Archivos y Patrimonio Cultural, Adela Rueda, visitó este lunes el yacimiento de Medellín para conocer el avance de estos últimos trabajos en los que se han hallado las piezas cerámicas.
Aunque aún es pronto para realizar una valoración definitiva sobre estos hallazgos, Rueda asegura que su aparición confirma «el contacto del mundo tartésico con las rutas comerciales del Mediterráneo, y refuerza la relevancia de Medellín como enclave arqueológico de referencia en la Protohistoria peninsular».
Cerca de Casas del Turuñuelo
Este proyecto arqueológico, que se desarrollará hasta 2028, contempla excavaciones en nuevas áreas de la necrópolis, prospecciones, sondeos geofísicos, restauración de materiales arqueológicos y la creación de una exposición monográfica que difundirá los resultados obtenidos.
Declarada Bien de Interés Cultural en 2014, «la Necrópolis de Medellín continúa ofreciendo información esencial para comprender las comunidades tartésicas asentadas en el valle medio del Guadiana», como la aflorada en Casas del Turuñuelo, donde ya se levanta la cúpula que protegerá el edificio y permitirá la visita. El yacimiento tartésico de Guareña, del que han salido piezas tan relevantes como los Rostros del Turuñuelo o la tablilla de pizarra con un alfabeto, se sitúa a solo quince minutos en coche de Medellín.
Medellín en los museos
Precisamente, en el lugar donde se pueden ver esos relieves del Turuñuelo, en la nueva sala de Protohistoria del Museo de Badajoz, también ocupa un papel muy destacado la necrópolis de Medellín y sus tumbas.
Por otro lado, además de exhibirse algunas de sus piezas más representativas en el Museo Arqueológico Nacional, las sepulturas de Medellín han viajado a distintas exposiciones 'Argantonio Rey de Tartessos' (Alicante-Sevilla) o 'Los Griegos en España' (Madrid) son algunos ejemplos.
Los expertos que han participado en la elaboración del convenio que hace posible las últimas excavaciones en la necrópolis consideran que, en relación con su importancia, tal vez sea el yacimiento protohistórico de referencia menos conocido de Extremadura, sobre todo si lo «comparamos con otros como Cancho Roano».