Así ha sido el examen de Historia en la PAU de Extremadura, la prueba más temida

El examen ha cambiado y solo hay un modelo, no dos como antes, un hecho que ha generado mucha incertidumbre hasta que este miércoles la realidad ha demostrado que ni la prueba había cambiado tanto y que era más fácil de lo esperado. La sensación entre los jóvenes tras enfrentarse al ejercicio ha sido de alivio.

«Fácil, pero bastante largo. Era lo esperado, lo que llevábamos preparando todo el curso», comentaban Enrique Velasco, Manuel Talavera y David Higuero, jóvenes que se decantan por grados de ingeniería. «No ha sido como otros exámenes, por ejemplo Lengua con la sintaxis», añadían.

Entre los contenidos, han podido elegir entre explicar el conflicto de la Guerra Civil o la Transición a la democracia. Asimismo debían realizar un comentario de fuente histórica y para ello escoger entre dos gráficos sobre la clase obrera y la conflictividad laboral en la España franquista o un fragmento del Manifiesto de los Persas y relacionarlo con la personalidad de Fernando VII y las fases del conflicto entre liberales y absolutistas.

Finalmente, en otro de los bloques han tenido que ordenar cronológicamente varios personajes y procesos, explicar brevemente un mapa y asociarlo a su contexto histórico, y resumir uno de estos dos temas: el Conde Duque de Olivares o el medievo peninsular cristiano.

De este modo, y teniendo en cuenta las preguntas y las opiniones de los aspirantes, se evidencia de nuevo lo que ya experimentaron gran parte de los jóvenes en la jornada inaugural de la selectividad. Está siendo menos difícil de lo esperado.

Eso sí, ha habido críticas también, sobre todo en la prueba de Lengua y Literatura, que marcó el comienzo de la PAU y hubo quejas por «una sintaxis complicada», aunque el ejercicio era acorde a los modelos de exámenes publicados en octubre.

Desde entonces los estudiantes han trabajado en torno a esa base y, por primera vez, hay regiones que mantienen criterios de evaluación homogéneos.

Los ejercicios de cada materia están estructurados en apartados que pueden contener una o varias preguntas. Aunque existe la posibilidad de elegir entre algunas de ellas, no implica estudiar menos temario.

Las faltas ortográficas son menos exigentes que en años anteriores. El Ministerio de Universidades armonizó algunos criterios sobre penalización en este asunto. Cometer errores ortográficos ya no será motivo de suspenso directo por regla general. Si antes con más de cinco fallos en el examen de Lengua se consideraba no aprobado, ahora lo máximo a descontar son dos puntos.

Además, la nueva PAU se adapta a la última reforma educativa, la conocida como Ley Celaá. Entró en vigor en 2021 y hace hincapié en la parte competencial.

Aparte de Historia de España, este miércoles también se ha celebrado la prueba de Inglés. Por la tarde es el turno de Matemáticas II, Griego II, Movimientos Culturales y Artísticos, Dibujo Técnico, Ciencias generales, Portugués, Francés, Artes Escénicas II y Geología Ciencias Ambientales.

La última jornada congregará a menos estudiantes porque muchos de los exámenes son de materias específicas de cada modalidad de Bachillerato y algunas de ellas son solo para los estudiantes que se presentan a la fase voluntaria con el objetivo de subir nota.

Este jueves empieza con el examen de Química y continúa con Técnicas de Expresión Grafico-Plásticas, Geografía, Coro, Biología, Tecnología, Dibujo Artístico, Latín, Análisis Musical, Empresa y Dibujo Técnico II.