35 años de excelencia que llevan a José Polo y Toño Pérez al olimpo de la gastronomía

Un muy emocionado Toño Pérez ha subido al escenario del Palacio de Congresos de Toledo para agradecer el reconocimiento: «Es un broche de oro para una historia de amor; Jose, esta estrella es tuya», afirmó para referirse a su socio y compañero José Polo. «Esta historia se remonta a hace 45 años, Jose iba a estudiar Filosofía y yo Bellas Artes, y después decidimos abrir un restaurante; Jose soñaba con tener una estrella Michelín, y por eso estas estrellas son tuyas».

También tuvo palabras para Extremadura, a la que se refirió como «uno de los territorios más humildes de este país y uno de los sitios más especiales, una tierra bella que Michelín ha sabido entender y reconocer»

José Polo habló con HOY minutos después de anunciarse el galardón: «Estoy llorando como un niño chico, no puedo ni hablar. No puedo estar más contento».

Atrio juega desde este martes en la Champions de los denominados 'triestrellados'. Comparte liga con otros gigantes de la gastronomía española como Arzak, Martín Berasategui, El Celler de Can Roca, DiverXO o Quique Dacosta, chef extremeño que tiene su restaurante en Dénia.

Con este reconocimiento, Toño Pérez y José Polo logran poner un broche de oro a su trayectoria entre fogones vinculada a la cocina de vanguardia. Atrio abrió sus puertas en el año 1987. La primera estrella llegó en el año 1994 y la segunda, nueve años después, en 2003. Este año han recibido el Gueridón de Oro de la Gastronómika de San Sebastián.

Desde hace una década Atrio es más que un restaurante. A finales de 2010 cambió su local de la plaza de los Maestros, junto al Paseo de Cánovas, por un edifico enclavado en la Ciudad Monumental que permitió complementar los fogones con un hotel de cinco estrellas, vinculado a la lujosa cadena Relais & Chateux.

Los arquitectos Mansilla y Tuñón, este último galardonado con el Premio Nacional de Arquitectura 2022, fueron los encargados de rehabilitar el inmueble, una obra que ha puesto a Cáceres en el escaparate de la vanguardia y que en el año 2001 fue reconocido con el premio FAD de arquitectura.

Mientras Toño Pérez se encarga de llevar la batuta en la cocina, José Polo mima la bodega del restaurante, considerada una de las mejores del mundo, por la cantidad y calidad de sus caldos. Comer en Atrio el amplio menú degustación basado en el cerdo ibérico cuesta 205 euros. El precio no incluye la bebida.

La bodega de Atrio tiene protagonismo propio, más aún desde que en octubre de 2021 sufriera el robo de 45 botellas valofradas en 1,6 millones de euros. Entre ellas se encuentra la joya de la corona, un caldo de 1806 cuyo precio en carta alcanza los 350.000 euros. Los presuntos responsables fueron detenidos este verano y se encuentran en prisión a la espera de juicio, aunque los vinos no han aparecido.

La carta está formada por 3.000 referencias y 40.000 botellas . Al igual que la cocina, la colección de vinos de Atrio también ha sido galardonada en varias ocasiones. José Polo fue reconocido como el mejor director de sala de 2014 por la Real Academia de Gastronomía y la Cofradía de la Buena Mesa. Y más tarde llegó el premio Gran Award, que la revista especializada 'Wine Spectator' concede a las mejores bodegas del mundo.

Atrio no para de crecer y la tercera estrella no le podría haber llegado en mejor momento. Toño y José han anunciado para el día 30 de este mes la apertura de su nuevo proyecto hotelero en la Casa Palacio de los Paredes-Saavedra, una construcción del siglo XIV en la calle Ancha, situada a escasos metros del restaurante. Son 11 suites de gran lujo a un precio desde 800 euros la noche que contarán con servicio de mayordomo y estarán destinados a clientes que busquen estancias más largas en la ciudad.

En mayo de 2019 los dueños de Atrio compraron en subasta pública por 1,2 millones el palacio de la antigua sede de Carreteras de la plaza de los Golfines, donde tiene previsto ubicar la Fundación Atrio y una escuela de música y danza.

También en los últimos tiempos años se han hecho con la gestión del restaurante Torre de Sande de Cáceres.