El SES anuncia la reforma del Plaza de Argel, en Cáceres, tras confirmar que la estructura es segura
Inicia los trámites para licitar la redacción del proyecto y prevé mantener la actividad en el centro de salud mientras duren las obras
Los resultados arrojados por el estudio arquitectónico al que acaba de ser sometido el edificio del centro de salud Plaza de Argel, situado junto a ... la Plaza de Toros, han despejado todas las incógnitas sobre el futuro del inmueble. Las catas encargadas por el Servicio Extremeño de Salud (SES) han confirmado que la estructura es segura y, con el informe sobre la mesa, la Junta de Extremadura anuncia su rehabilitación sin que esta intervención esté condicionada ya por ningún otro factor.
De hecho, la institución regional ha dado ya el primer paso en este sentido y, según ha adelantado a este diario, se está preparando en este momento la documentación técnica para licitar la redacción del proyecto de rehabilitación. La intención del SES es realizar la obra manteniendo la actividad ordinaria del ambulatorio, que atiende a una población de 12.000 pacientes. «Se realizarán las actuaciones de contratación lo antes posible», apostilla el SES.
Este anuncio cierra un debate abierto hace justo un año cuando el consejero de Sanidad, José María Vergeles, comunicó el traslado del centro de salud a las instalaciones del Hospital Nuestra Señora de la Montaña –al igual que ha ocurrido con el ambulatorio Zona Centro– y la devolución del edificio ubicado en la Plaza de Argel a la Tesorería de la Seguridad Social, propietaria de estas dependencias.
Pero el anuncio generó una cascada de reacciones negativas entre los vecinos de Aguas Vivas y otras zonas cercanas, como San Blas, que veían en este traslado la pérdida de un servicio próximo a los barrios a los que atiende este ambulatorio, entre los que también están la Ciudad Monumental, La Zambomba y San Marquino. Cánovas, argumentaban, estaba demasiado lejos.
Tras mantener varios encuentros con los residentes, el SES se comprometió a dejar el centro de salud en su lugar original y avanzó entonces que la intervención podría ser integral –sin llegar a tocar su fachada protegida– o parcial, en función de las conclusiones que arrojara el estudio técnico que tenía previsto encargar. Se daba por sentado, además, que habría que sustituir la techumbre de madera y reforzar la entreplanta del edificio.
La pasada primavera comenzaron las catas en el inmueble, realizadas por la empresa cacereña Sonitu Consultoría y Servicios S.L. La Junta varió entonces su mensaje y dijo que la decisión final de rehabilitar o no la edificación dependería de los resultados de este amplio estudio.
Pues bien, esos resultados ya están. Y el SES ha dado luz verde a la intervención. El chequeo al que ha sido sometido esta construcción levantada en la década de los años 30 del siglo XX ha consistido en abordar las patologías generales para, después, evaluar el soporte estructural. Los técnicos han examinado forjados, la cimentación del inmueble y han comprobado cuál es el estado de la estructura de acuerdo a los usos previstos.
Desde 1985
El centro de salud Plaza de Argel comenzó a funcionar en 1985 en un inmueble que está incluido en el catálogo de bienes protegidos de la ciudad. Se terminó de levantar en el año 1931 para ser la sede, en sus orígenes, del Instituto Provincial de Higiene. Un estudio encargado por la Junta en el año 2011 cifró en 1,7 millones de euros el coste de su rehabilitación.
Un traslado frustrado que chocó con el rechazo de los vecinos
Los cimientos del centro de salud Plaza de Argel se tambalearon, de manera figurada, el 29 de septiembre de 2020. Ese día el consejero de Sanidad, José María Vergeles, anunció por sorpresa la creación de un macrocentro de salud en el Hospital Nuestra Señora de la Montaña. El plan del SES (Servicio Extremeño de Salud) contemplaba el traslado a la planta baja del Zona Centro, una medida que sí se ha llevado a cabo. Y, además, incluía el cambio de ubicación del centro de salud Plaza de Argel hasta la entreplanta, tras unas obras de adaptación valoradas en 600.000 euros en una superficie de 2.000 metros cuadrados.
El consejero, que ya advirtió en ese momento que la ubicación podría no ser la definitiva, explicó que la decisión del traslado estaba justificada para velar por la seguridad de los pacientes y del personal sanitario.
Vergeles detalló que las actuales instalaciones están muy deterioradas y que rehabilitar el edificio sería muy costoso (y las posibilidades limitadas), al tratarse de un inmueble protegido. De ahí que no descartó la idea de buscar en un futuro otro emplazamiento en consenso con los residentes, consciente de la distancia existente entre el actual centro de salud y el Hospital Provincial, situado en pleno Paseo de Cánovas.
El rechazo frontal de los vecinos al anuncio de José María Vergeles fue inmediato. Se negaban a marcharse hasta el Virgen de la Montaña. Y en las reuniones celebradas con el SES siempre mantuvieron que su primera opción era arreglar y actualizar el edificio actual.
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