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La directora del centro de Helga de Alvear.
Día del museo

Mi obra favorita

El Helga de Alvear celebra visitas guiadas y talleres infantiles y el Palacio de las Veletas acoge esta mañana 'performances' inspiradas en El Greco para festejar el Día de los Museos

MARÍA JOSÉ TORREJÓN

Domingo, 18 de mayo 2014, 08:36

Luis Acha, el director de la Fundación Mercedes Calles, opta por un Tiziano. María Jesús Ávila, coordinadora del Centro de Artes Visuales de la Fundación Helga de Alvear, se inclina por una fotografía firmada por el artista alemán Thomas Demand. Y el concejal de Cultura, Jesús Bravo, se queda con el cuadro de la Virgen de la Paz, de Rafael Lucenqui.

Los responsables de las salas expositivas más importantes de la ciudad y su entorno comparten con HOY su pieza favorita coincidiendo con la celebración del Día Internacional de los Museos, que se conmemora hoy, 18 de mayo, en todo el mundo. En torno a esta fecha, los museos de la ciudad organizan actividades extraordinarias. Algunos, como la Fundación Mercedes Calles, lo hicieron por anticipado, el pasado viernes. Y otros, como el Museo Municipal, lo harán a partir de la próxima semana. La agenda incluye actos para hoy en la Fundación Helga de Alvear, con visitas guiadas y talleres infantiles, y en el Museo de Cáceres. Aquí los alumnos de Bachillerato Artístico del Instituto Al-Qazeres desarrollarán a partir de las doce del mediodía varias 'performances' sobre la figura de El Greco.

El centro de la calle Pizarro, el Vostell de Malpartida, el Museo Casa Pedrilla, el Museo Municipal y la Casa de los Becerra, sede de la Fundación Mercedes Calles, abren sus puertas a este diario para ofrecer un recorrido diferente, guiado esta vez por las preferencias de las personas que están al frente de estas dotaciones culturales. Pasen y vean.

María Jesús Ávila Coordinadora del Centro de Artes Visuales Fundación Helga de Alvear

'Ghost', de Thomas Demand

María Jesús Avila desciende hasta la planta menos uno de la antigua Casa Grande para mostrar la pieza elegida. Lleva la firma del artista alemán Thomas Demand (Múnich, 1964) y forma parte de la exposición que actualmente acoge el centro: 'Las lágrimas de las cosas'.

«He elegido la obra 'Ghost' -fantasma en español- porque es una pieza muy significativa dentro de él», dice en referencia a Demand. «Nos hace replantearnos a los espectadores cómo vemos las imágenes que nos llegan, que son tan abundantes hoy en día a través de los medios de comunicación y las nuevas tecnologías», explica Ávila ante la fotografía, que también ilustra el catálogo de la muestra.

«Tenemos la tendencia de creernos todo lo que nos dice una imagen. Durante mucho tiempo, se mantuvo la idea de que la fotografía refleja la realidad. Y cuando estamos ante una obra como esta no nos cuestionamos que sea real. Y es exactamente en este margen, entre lo verdadero y lo verosímil, donde trabaja Thomas Demand», añade la coordinadora del Helga de Alvear.

Tras esta introducción previa, María Jesús Ávila se detiene a desgranar los detalles concretos de 'Ghost'. «Si miras la fotografía, aparte de esos elementos extraños como son el cazo y las tijeras flotando, te crees la obra. Pero el artista no te engaña y te está diciendo que esa realidad es falsa. En la imagen hay una radio, un armario, un calendario, una postal, unos libros... Pero si te detienes fijamente a mirar te das cuenta de que el calendario no tiene números, de que la radio no tiene botones y de que a la puerta del armario le falta el pomo. Todo es falso y él no lo oculta», resume.

Thomas Demand creó esta imagen a partir de una noticia que leyó sobre una casa en la que se decía que había fantasmas que movían los objetos. «Lo que hizo fue crear una maqueta a tamaño natural, hecha en cartón. Todo es falso. Lo que intenta es que nos replanteemos nuestra actitud frente a las imágenes hoy en día. El problema de la sociedad contemporánea es que miramos pero no vemos», concluye.

Durante el año 2013, el Centro de Artes Visuales recibió 15.107 visitantes. Y desde su inauguración, en junio de 2010, han pasado por sus instalaciones 53.119 personas. A los actos organizados para hoy por la fundación, se une la iniciativa programada por la asociación de amigos del centro. Se trata de una charla impartida por la artista barcelonesa Montserrat Soto, que comenzará a las once de la mañana.

Luis Acha Director de la Fundación Mercedes Calles

'Retrato de gentilhombre (Hipólito de Médicis)', de Tiziano

Del diálogo con el arte contemporáneo que propone la Fundación Helga de Alvear al encuentro con los grandes maestros de la pintura italiana que ofrece la Fundación Mercedes Calles hasta el 30 de junio. La Casa de los Becerra compatibiliza su exposición permanente con grandes muestras temporales como la que acoge en la actualidad: 'Il furore della ricerca', compuesta por piezas de la colección Cavallini Sgarbi.

Luis Acha, director de la fundación, se queda con uno de los cuadros de esta muestra temporal: un Tiziano, fechado en 1533. La obra se titula 'Retrato de gentilhombre (Hipólito de Médicis)'. «Representa a un personaje de la Florencia del siglo XVI. Cuando su padre, Julio de Médicis, fue nombrado papa como Clemente VII le dejó a él temporalmente gobernando Florencia», explica Acha. «El cuadro representa a una persona seria, con mirada penetrante, en pose de poder. Y, a la vez, en la composición aparecen libros, que destacan su faceta humanista», añade. ¿Por qué es éste su favorito entre los 39 que integran la exposición? «Era muy difícil elegir. Pero me quedo con Tiziano porque también fue pintor en la corte española y, quizás, sea el más conocido aquí», resume Acha.

56.116 personas han contemplado esta muestra desde su inauguración, el pasado 27 de febrero. Durante el 2013, la Fundación Mercedes Calles registró un total de 136.000 visitantes.

Jesús Bravo Concejal de Cultura

'Virgen de la Paz', de Rafael Lucenqui

El Museo Municipal de Cáceres, enclavado en la Plaza de Publio Hurtado, depende de la Concejalía de Cultura. El responsable de esta cartera, Jesús Bravo, no tiene dudas a la hora de quedarse con una pieza. Se inclina por el cuadro de la Virgen de la Paz, muy vinculado a la memoria colectiva de generaciones.

«Simboliza algo muy importante para todos los cacereños por el tiempo que estuvo en los soportales de la Plaza Mayor y por la cantidad de mujeres embarazadas que se habrán postrado delante esta obra, también conocida como la Virgen de los Partos», explica el concejal. El segundo motivo que le lleva a inclinarse por esta pieza, admite, es su autor. «Es una de las obras más importantes de un artista de origen polaco como era Rafael Lucenqui, del siglo XIX. Este cuadro dice mucho para todos los cacereños porque es una obra muy cacereña. Desde bien pequeñitos, hemos pasado por la Plaza y nos hemos quedado mirándolo», resume el concejal.

La obra original de Lucenqui estuvo en la Plaza desde 1865 a 1992. En los noventa se decidió conservar el cuadro en el Museo Municipal y poner en su lugar una réplica. Desde entonces, por la hornacina han pasado ya varias copias. La última se instaló en octubre de 2013, protegida esta vez por una reja para blindarla contra el vandalismo. El Museo Municipal recibió durante 2013 cerca de 14.000 visitantes.

María Jesús Herreros de Tejada Directora del Museo Pedrilla

'Buenos amigos', de J. José Narbón y objetos personales de Mario Roso de Luna

El Museo Pedrilla, de la Diputación Provincial, es una sala ecléctica. Por eso, su directora tiene sus preferencias divididas entre la colección de objetos de Mario Roso de Luna y un cuadro de Juan José Narbón.

El museo ofrece una aproximación a una treintena de personajes relevantes de la provincia de la época contemporánea (siglos XIX y XX) a través de sus pertenencias personales. En la vitrina dedicada a Mario Roso de Luna, nacido en Logrosán, se puede ver desde una pitillera de plata hasta unas gafas. Fue un hombre polifacético. «Contribuyó en la elaboración de la enciclopedia francesa, descubrió un cometa que lleva su nombre e inventó un aparato para medir el espacio entre las estrellas», enumera María Jesús Herreros de Tejada, Pachiqui.

De Narbón elige el cuadro 'Buenos amigos', realizado en 1970. «Representa la simbiosis entre el hombre y el animal», cuenta mientras detalla que el pintor refleja en sus obras el costumbrismo desde la óptica de la crítica social. «Enfoca su costumbrismo hacia la defensa del campesino, que trabaja la tierra, y que tiene un único amigo: el burro», añade. «Narbón, técnicamente, es un vanguardista. Es muy creativo, es un rompedor de todas las normas», concluye. El Museo Pedrilla recibe al año 18.000 visitas.

Josefa Cortés Directora del Museo Vostell Malpartida

'Depresión endógena', de Wolf Vostell

A 14 kilómetros de la capital, en Los Barruecos, se encuentra el universo creado por Wolf Vostell en un antiguo secadero de lana. Josefa Cortés está al frente de este singular museo, referente del movimiento fluxus.

Su pieza preferida, revela, es una instalación de Vostell titulada 'Depresión endógena'. La imagen es rompedora: televisores y radios salpicadas por pegotes de cemento. Aunque la obra es de 1978, el mensaje está de plena actualidad. «Aglutina una de las facetas del trabajo de Vostell de más peso en su producción. Se trata de la relacionada con los medios de comunicación.

Según el artista, la presencia de los medios es un alarde tecnológico de la capacidad del ser humano para comunicarse y llegar a los demás. Pero el problema no está en la herramienta, sino en el uso que se le da. Vostell, con 'Depresión endógena', pone un espejo delante de realidad y nos muestra, a través de esta instalación, los riesgos que el hombre contemporáneo corre al dejarse llevar por la sobredosis de información», explica Cortés. El museo que dirige recibió el año pasado 38.660 visitas.

Juan Manuel Valadés Director del Museo de Cáceres

Retratos escultóricos e inscripción romana

Juan Manuel Valadés está al frente del Museo de Cáceres, que tuvo 142.787 visitas durante 2013. El centro acaba de incorporar a su colección tres retratos escultóricos romanos y una inscripción, hallados en Talavera la Vieja. «Los retratos son del primer siglo de nuestra era.

Y la inscripción seguramente es anterior. Para el museo son muy importantes porque las cuatro piezas fueron halladas casualmente y pasaron en algún momento a manos privadas, aunque se sabía que existían. Afortunadamente, y gracias a que hubo una denuncia, se requisaron y se depositaron en el Museo Arqueológico Nacional.

Ahí han estado durante 20 años hasta que hace un par de años se retomó el tema. Nosotros, desde el Museo, lo habíamos reclamado mil veces», recuerda Valadés desde la Plaza de las Veletas, último punto del recorrido.

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