Caso Azagra / Hermano del presidente del Gobierno

David Sánchez sale del juzgado entre una nube de cámaras tras declarar algo menos de una hora

Sánchez ha estado algo menos de una hora respondiendo a las preguntas de la jueza Beatriz Biedma, que le volvió a citar este viernes para aclarar la contratación de su colaborador Luis Carrero e investigar si usó su influencia para que la Diputación de Badajoz lo contratara.

La declaración se ha efectuado a puerta cerrada, por tratarse de la fase de instrucción, por lo que de momento se desconoce qué ha dicho. En aquella ocasión sí pudo verse el vídeo unos días después, cuando le fue notificado a las partes. Pero en esta ocasión no será posible, dado que la jueza ha determinado que solo se pueden consultar por parte de las partes personadas en el procedimiento y en el juzgado.

De esta manera, evita que los interrogatorios lleguen a los medios de comunicación. De aquella primera comparecencia, de unos 90 minutos y más larga que la de este viernes, se hicieron virales algunas secuencias en las redes sociales, donde titubeaba, aunque esos segundos no se correspondían con el contenido global de su intervención.

Este viernes, David Sánchez sabe que las imágenes no llegarán a los medios. Y quizás por eso ha decidido cambiar su forma de entrada y salida del edificio. Si en enero accedió y salió por una puerta trasera, dentro de un vehículo, esta mañana a entrado y salido a pie por la puerta principal. Entonces argumentó su abogado que era lo más conveniente porque habían sido amenazados en redes sociales.

A su llegada esta mañana tenía un semblante tranquilo y pudo recorrer con calma los 50 metros que separaban la calle de la puerta del edificio. Nada que ver con la salida. Tan solo ha tenido calma en el recibidor del edificio, donde ha saludado a los agentes de seguridad y les ha estrechado la mano antes de salir a la calle.

Fuera, los periodistas han rebasado la línea de vallas y lo han rodeado en su segundo paseíllo, en el que se le ha visto más agobiado que a la entrada. Tampoco ha respondido a las preguntas de los medios mientras avanzaba hasta la avenida José Caldito Ruiz, donde ha subido el turismo Citroën de color blanco en el que ha llegado a primera hora de la mañana.

En esos segundos de expectación ha tenido a los periodistas a centímetros, ha sido arrastrada alguna valla por los informadores y las cámaras lo han seguido a cada paso mientras la Policía Nacional controlaba que no se produjera ningún incidente.

Solo al final la policía ha pedido a los periodistas que dejaran libre el espacio que necesitaba el turismo para iniciar la marcha, que se ha realizado sin ningún tipo de problemas. De este modo ha terminado su segunda visita al juzgado en la fase de instrucción.