En 1900, Daniel Berjano llevó su aceite desde Villamiel hasta la Exposición Universal de París y se trajo la máxima distinción, medalla de plata, y ... un consejo del jurado que premió su producto: «Debería presentar usted mejor ese aceite maravilloso». Dani, su tataranieto, ha hecho caso al jurado y su aceite Hacienda Nava del Rey, primorosamente envasado, acaba de ganar una medalla de plata en los premios Extrema Selección 2021 en la categoría de pequeñas producciones de aceites de gran calidad. Que conste que Daniel Berjano, tras el premio parisino, ya envasó su aceite en una lata elegante hace más de cien años, pero no dejaba de ser una excepción y el aceite extremeño, durante el último siglo, se ha envasado en botellas y garrafas de plástico sin gracia ni esmero. Pero la situación ha cambiado sustancialmente. El aceite de oliva virgen extra de Extremadura, además de destacar por su calidad, llega a las tiendas en botellas y frascos de diseño elegante. La de Hacienda Nava del Rey es una botellita blanca que recuerda a la de un tónico francés. El envase del aceite Monte Verde Natura parece una botella de Porto Graham's 20 Years Tawny. En bodegas de Cognac hemos visto envases preciosos como los de los aceites Jacoliva y MM Gourmet. El aceite Monte Milagros viene en frascas tentadoras que recuerdan a las de licor café y las de Vieiru sorprenden con su estética gin Maior o vodka Finlandia. El aceite extremeño tenía calidad, ahora, además, tiene imagen.
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