Un «tsunami de nubes» impacta en la costa de Portugal

Un fenómeno meteorológico poco frecuente hizo saltar las alarmas este pasado domingo, 29 de junio, en varias localidades de la costa oeste de Portugal. Se trata de las conocidas como nubes rodantes o «volutus», una formación atmosférica inusual que avanzó desde el océano Atlántico hacia la línea costera, generando expectación entre residentes y turistas que se encontraban en las playas de Peniche, Nazaré y Póvoa de Varzim.

La incredulidad de este fenómeno ha provocado que las imágenes se viralizaran rápidamente en redes como X (antes Twitter), Instagram y Facebook, generando cientos de preguntas y comentarios de usuarios que pedían una explicación ante lo que veían, ya que muchos creen que se trata de una imagen generada por la Inteligencia Artificial.

Ante el revuelo generado por las imágenes y vídeos difundidos por los usuarios, el Instituto Portugués del Mar y de la Atmósfera (IPMA) ha emitido un comunicado oficial en el que ha confirmado que se trata de un fenómeno real y no de una imagen 'fake'

Según ha indicado el IPMA, «en la tarde del 29 de junio de 2025, se observaron nubes con forma de rollo», especificando que estas formaciones corresponden a la especie «volutus», término en latín utilizado para describir este tipo de nubes. «En inglés se conocen como roll clouds y, por tanto, en portugués pueden denominarse nubes roll», ha añadido el organismo.

El IPMA ha recordado que las nubes «volutus» son relativamente raras y que «solo fueron incluidas en el Atlas Internacional de Nubes de la Organización Meteorológica Mundial en la última revisión realizada en 2017». Se caracterizan por su forma tubular y rodante, desplazándose horizontalmente en la atmósfera.

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En este caso, las condiciones para su formación estuvieron favorecidas por un contraste térmico entre el mar y la tierra. «Estas nubes se formaron sobre el mar alrededor de las 15:30 horas y se acercaron a la costa oeste del continente entre las 17:00 y las 18:00 horas locales», ha señalado el IPMA.

En el comunicado añaden que, según las imágenes captadas por el satélite Meteosat de tercera generación, se pudo observar «una secuencia de varias nubes de este tipo, lo que denota la existencia de un flujo perturbado, con ondas en el interior de la atmósfera», indica.

A pesar de su apariencia llamativa, el IPMA aclaró que este tipo de fenómenos no representa un riesgo para la seguridad de las personas. Según el organismo, las principales consecuencias fueron algunas ráfagas de viento y una ligera alteración atmosférica durante el paso de las nubes.