De establo a hotel cinco estrellas: un 'escondite' rural con vistas únicas en un pequeño pueblo de Extremadura
Un singular hotel donde contemplar el castillo de Trevejo desde el agua
Corría el año 2003 cuando una pareja de Sabadell visitó por primera vez la Sierra de Gata. Les bastó aquella estancia para quedar prendados de la belleza del lugar. «Nos cautivó Trevejo», recuerdan Tino y Carmen, que desde entonces mantienen un vínculo especial con este rincón del norte de Cáceres. De aquella primera visita surgió una decisión inesperada: comprar una casa en el propio Trevejo. Dos décadas después, aquel impulso inicial se ha convertido en un pequeño proyecto de vida ligado al turismo rural.
Hoy gestionan varios alojamientos bajo el nombre de Casas Rurales Trevejo, entre ellos 'Agua de estrellas', 'El balcón de los sueños' y 'El escondite del agua', tres parajes de ensueño que dejan claro que allí se va a desconectar, a contemplar la naturaleza y a disfrutar de las pequeñas cosas.
El 'escondite', levantado sobre lo que fuera un antiguo establo, es uno de los pocos hoteles rurales del lugar que cuenta con cinco estrellas. Su localización, singularidad y decoración le llevaron a ser reconocido con la máxima categoría. «Para ponerlo en pie pasamos muchas dificultades», admite Tino, «pero era nuestra ilusión».
Una escapada exclusiva
Este hotel es 'solo para dos', lo que lo convierte en un lugar único en el que disfrutar de una escapada en plena naturaleza y desconectar del ruido. Pero si algo lo hace especial, son las vistas.
Desde sus estancias puedes disfrutar de unas vistas espectaculares de la Sierra de Gata y desde su alberca de agua salada te bañarás divisando el castillo de Trevejo.
Cientos de parejas han pasado por allí y coinciden: es un lugar ideal para desconectar. Unos de sus últimos visitantes, incluso, definieron la experiencia como «perfecta»: «Dicen las malas lenguas que la perfección no existe, pero en este lugar se está muy cerca de ella».
Situado a poco más de dos horas de Badajoz y a hora y media de Cáceres, Trevejo continúa siendo un destino discreto, pero cada vez más presente en las agendas de quienes buscan un turismo de calma, naturaleza y memoria histórica.