La Diputación de Cáceres, un puente solidario entre Extremadura y Gaza

Desde los pequeños pueblos de la provincia de Cáceres hasta los campos de refugiados en Gaza, donde miles de personas esperan ayuda para poder sobrevivir, existe una conexión real gracias al compromiso de la Diputación de Cáceres con la Cooperación Internacional.

En 2025, la institución provincial ha destinado 1.099.332 euros a proyectos de Cooperación y Ayuda al Desarrollo. Este esfuerzo no es nuevo, ya que la diputación lleva años apostando por el apoyo a organizaciones que trabajan en zonas especialmente vulnerables con un trabajo que va de lo local a lo global y que repercute directamente en la personas. Uno de los proyectos más destacados es el que se realiza junto a la ONG extremeña 'Sonrisas en Acción', que desarrolla una labor fundamental en el norte de Gaza, en plena crisis humanitaria.

Con origen en Cáceres, 'Sonrisas en Acción' es una organización que trabaja desde hace más de una década en contextos humanitarios muy difíciles. Ha estado presente en Siria, Ucrania, Serbia, Líbano o los campamentos saharauis, y ahora centra gran parte de sus esfuerzos en Palestina. En todos esos lugares lleva a cabo proyectos de ayuda directa como es la distribución de alimentos, productos de higiene, atención psicosocial, educación y apoyo sanitario. Su misión es clara: atender a quienes más lo necesitan, de forma rápida, eficaz y respetuosa.

La Diputación de Cáceres apoya esta labor, ya que está convencida de que la solidaridad no puede esperar. Así, el trabajo de 'Sonrisas en Acción' está marcado por la urgencia que necesitan familias desplazadas que no tienen acceso a comida, mujeres y niñas sin productos básicos para su higiene íntima, niños y niñas que han perdido su hogar, su escuela y, en muchos casos, parte de su familia. En este escenario tan duro, cada pequeño gesto cobra un gran significado. Para ello, la diputación ha destinado este 2025 un total de 30.000 euros para que la organización pueda ayudar a los que más lo necesitan en el Líbano.

Uno de los proyectos más sensibles en el que trabaja esta ONG cacereña gracias a la Diputación de Cáceres aborda la salud menstrual con mujeres refugiadas. Es común que en zonas de conflictos las mujeres no tengan acceso a compresas, jabón o agua limpia para su higiene íntima. Este hecho no solo pone en riesgo su salud física, sino también su bienestar emocional. Gracias a los fondos públicos y a la colaboración de personal sanitario, 'Sonrisas en Acción' organiza sesiones informativas, resuelve dudas y entrega 'kits de dignidad' que contienen productos básicos como gel, champú, compresas o toallitas, entre otros utensilios.

También lleva a cabo acciones educativas y psicosociales con la infancia. Muchos niños y niñas han vivido situaciones extremadamente traumáticas: la pérdida de sus padres, bombardeos, heridas físicas, miedo constante. En medio de ese entorno, el simple hecho de poder jugar, dibujar, escuchar una historia o recibir atención psicológica puede cambiarlo todo. «Los niños necesitan recuperar su infancia, aunque sea solo durante unas horas al día», explica Patricia Sierra, responsable de 'Sonrisas en Acción'.

El reparto de alimentos es otro de los pilares de la labor de la ONGcacereña. Gracias al apoyo de cooperantes locales, están distribuyendo durante las últimas semanas comidas calientes en los campos de personas refugiadas internas en Gaza. Muchas familias solo comen gracias a estas entregas. Algunas madres cuentan que sus hijos comparten un solo plato de comida al día porque no tienen más. Esta realidad tan dura llega a Cáceres en forma de testimonios que recuerdan la importancia de cada euro invertido en ayuda humanitaria.

«Cada vez que llegamos a un campo, las madres nos preguntan si traemos comida o compresas. Puede parecer algo básico, pero aquí lo es todo. No tienen nada. Cada kit que entregamos, cada plato de comida, es vida. Y esa vida comienza en Cáceres, en nuestros pueblos, donde personas anónimas colaboran sin saber que están salvando a otras al otro lado del mundo», pone de relieve Patricia Sierra, que vive esta realidad en primera persona.

Así, lo que hace especial este proyecto es que une el compromiso de una administración pública, como la Diputación de Cáceres, con el trabajo sobre el terreno de una organización local con vocación internacional. Esta alianza permite actuar de manera ágil, efectiva y con un profundo respeto por los derechos humanos. Todo esto se hace desde una mirada humana y cercana, que busca no solo cubrir necesidades básicas, sino también ofrecer apoyo emocional, seguridad y dignidad.

Además, 'Sonrisas en Acción' no trabaja sola. Lo hace en red, junto a otras entidades locales e internacionales, compartiendo recursos, información y soluciones. Esto permite una mejor organización y una distribución más rápida de la ayuda, especialmente en zonas donde la situación cambia cada día. La colaboración entre organizaciones, instituciones y personas locales es una de las claves del éxito de estas acciones.

Cáceres demuestra, con hechos, que lo que hacemos desde aquí tiene un impacto real a miles de kilómetros. Los fondos públicos que se destinan a cooperación no son un gasto, sino una inversión en humanidad. La Diputación de Cáceres lo entiende así, y por eso mantiene su compromiso con la Cooperación Internacional a través de cuatro grandes líneas de trabajo: la Cooperación al Desarrollo, la Cooperación Técnica (a través de Felcode), la Educación para la Ciudadanía Global y la Ayuda Humanitaria Urgente.