La guerra, en la mesa del G20
Editorial ·
Lunes, 18 de noviembre 2024, 22:58
El anfitrión del G20, el presidente de Brasil, se había «propuesto no traer la guerra» a la mesa del encuentro, pero Rusia se encargó de ... acompañar la llegada de su ministro de Exteriores a Río de Janeiro con los cadáveres de civiles esparcidos en una calle de Odesa. Son el terrible resultado de la última matanza ordenada por Vladímir Putin en Ucrania, que sigue a los ataques del fin de semana contra infraestructuras energéticas, con su balance de víctimas y apagones en puertas del invierno. Un encarnizamiento ya conocido, que no puede vincularse a la decisión de Joe Biden de permitir operaciones defensivas en territorio ruso con armas estadounidenses de largo alcance. Una medida que llega en un momento crítico para Kiev pero cuya influencia positiva en el curso del conflicto no es segura, por tardía, por limitarse a Kursk y porque se desconoce si los ucranianos disponen ya de un número significativo de estos misiles o podrán conseguirlos antes de que Donald Trump llegue a la Casa Blanca. La única escalada es la de Putin, que bendecido por China mantiene su agresión con armas iraníes y soldados norcoreanos, y vuelve a agitar el espantajo de «una fase nueva de la guerra».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.