La Junta estudia mejoras energéticas para la azucarera proyectada en Mérida

El consejero de Economía e Infraestructuras, José Luis Navarro, ha avanzado que se están estudiando «soluciones tecnológicas» que permitan a la azucarera proyectada en Mérida reducir los costes de producción derivados de la energía que necesita para procesar la remolacha, con el objetivo de que finalmente se decante por Extremadura frente al emplazamiento que valora en el Reino Unido.

Navarro se ha referido a esta cuestión en respuesta a los periodistas al término de una rueda de prensa celebrada en Mérida sobre la planta fotovoltaica proyectada en Talayuela (Cáceres), en la que participa una empresa que ya ha ofrecido una tecnología que permitiría abaratar los costes energéticos.

El consejero ha explicado que Mérida aventaja a su competidor en Reino Unido en todos los factores salvo el energético, y no porque la electricidad sea más barata allí, sino porque en el emplazamiento valorado cuenta con «circunstancias particulares muy concretas» que le benefician.

Así, tendría un coste de producción más competitivo que el de mercado gracias a que aprovecharía el calor del vapor residual generado por una planta próxima a la ubicación elegida.

En este sentido, el director general de Genia Global Energy, Gabriel Butler, ha reconocido que ya existen conversaciones para ofrecer soluciones que permitan a la azucarera disponer en Mérida también de un coste energético más competitivo.

Al respecto, ha explicado que su compañía ha construido la segunda planta de biogás más grande de Europa en Ucrania para que, también una azucarera, se abastezca del metano generado, reduciendo así su factura energética.

El consejero extremeño ha reconocido que esta sería una de las «soluciones tecnológicas» estudiadas para tratar de convencer a los promotores de la azucarera para que finalmente se decanten por su ubicación en Mérida.