Roban 350 plantones de cerezos en una finca del Valle del Jerte: «Sentimos rabia e impotencia»

El domingo por la mañana, cuando su marido regresó a la finca, se encontró con el terreno yermo, todos los plantones habían desaparecido. «Se nos cayó el mundo encima», dice María José Cobos. «Sentimos rabia, impotencia y un disgusto tremendo, esto nunca nos había ocurrido».

Explica que no se trata solo de la inversión económica, «sino del esfuerzo y el trabajo realizado para preparar el terreno, adquirir los plantones, colocarlos y fijarlos al suelo a una profundidad de metro y medio al menos. Son muchas las horas que hemos pasado para repoblar parte de la finca, retirando los cerezos viejos por otros nuevos, para continuar así con la producción».

Lo han querido hacer con cerezos de la variedad colt, «que está muy demandada, agotada en España de hecho, y que ya no podremos recuperar por eso, por lo que el robo que hemos sufrido nos supone un año de pérdida; creo que precisamente el robo ha sido para poder vender unos plantones que tienen mucha salida».

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El matrimonio ha denunciado lo ocurrido y el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) ha puesto en marcha una investigación para tratar de encontrar a los culpables del robo. «Consideramos que pueden haber sido más de tres personas», dice la propietaria de la finca. No solo porque la mañana del domingo hallaron pisadas en el terreno de tres botas diferentes, sino porque «es imposible robar en unas horas 350 plantones a la profundidad a la que estaban fijados en el suelo».

«Nunca antes nos había ocurrido algo similar», insiste María José. «A veces nos han robado entre 10 y 12, porque vamos repoblando la finca cada año, pero esta vez ha sido algo muy diferente, se han llevado los 350 que acabábamos de plantar, es muy duro constatar cómo en horas han terminado con días de trabajo y esfuerzo».