Quintana justifica los impuestos que paga Almaraz por los residuos que genera

En lo que a impuestos se refiere, expuso que lógicamente, «todo el mundo entiende que los hay por parte del Gobierno de España y por parte, en este caso, de la comunidad autónoma, porque ahí hay unos residuos que quedarán a lo largo de los siglos».

El delegado respondió así a las preguntas de los periodistas sobre que la Junta de Administradores de Centrales Nucleares de Almaraz-Trillo haya aclarado que el cese programado de la central de Almaraz «se debe fundamentalmente a la desproporcionada carga fiscal que sufre (435 millones de euros anuales), que supera todos sus costes operativos juntos».

«Los residuos están ahí, hay que hacer un nuevo almacén están ahí, hay que construirlo y además eso tendrá consecuencias para los próximos siglos, eso no lo podemos olvidar», recordó.

También incidió en que se trata de una actividad «privada exclusivamente» y gestionada por unas empresas privadas «que libremente firmaron en el año 2019 el cierre escalonado de la energía nuclear», de modo que son «las empresas quienes deben de tomar la iniciativa, si quieren continuar o no quieren continuar».

Para Quintana, los impuestos están plenamente justificados porque «lógicamente habrá que dedicar recursos en los próximos siglos» al tratamiento de dichos residuos.

Al mismo tiempo, destacó la importancia de los proyectos que se están llevando a cabo de energías alternativas actualmente en la comunidad extremeña.

En tramitación por parte de la Delegación del Gobierno, quiso resaltar nueve proyectos de fotovoltaicas, tres de almacenamiento de esa energía, conocido como hibridación y que son «importantes», y otros tres de bombeo de agua de los pantanos de Alcántara, Torrejón y Valdecañas. Añadió que bastantes de estos proyectos son promovidos «por los mismos propietarios de la central nuclear», porque «son los mismos propietarios quienes están apostando firmemente por las energías alternativas y sostenibles».