Extremadura fue la región con mayor bajada del desempleo en mayo

Un mes para la esperanza. El mercado laboral español y extremeño sufrieron un rebote y dejaron buenas cifras en mayo, mejores incluso de las que se suelen dar en esta época del año en un ejercicio normal. La parte medio vacía del vaso está en que después del cataclismo provocado por la COVID-19, todavía queda mucho camino antes de recuperar las cifras de empleo anteriores a la pandemia.

Mayo cerró con 111.389 desempleados, que son 4.056 menos de los que había en abril. El descenso es similar al del año pasado y considerablemente mejor que el del mismo periodo de 2018. En términos porcentuales, la caída es del 3,51%, la mayor de todas las regiones españolas, un dato relevante si se tiene en cuenta que el paro subió un 0,69% en el conjunto del país.

Por sectores, la construcción fue el sector donde más cayó el desempleo enExtremadura con 1.719 personas menos, seguido de los servicios (-1.292), la agricultura (-890) y la industria (-397). En cambio, durante el pasado mes se registraron 242 parados más procedentes del colectivo sin empleo anterior.

Sin embargo, ahora mismo hay en Extremadura 17.546 extremeños en la cola del Sexpe más que el año pasado por estas mismas fechas. La región tiene 6.143 desempleados más de los que había en febrero, el último mes antes de la llegada del coronavirus.

Mejores noticias dejan los datos del lado del empleo. El número de afiliados a la Seguridad Social en Extremadura aumentó en mayo en 6.855 respecto al mes anterior, hasta un total de 382.002 trabajadores. También en este caso la subida, del 1,83%, es muy superior a la registrada en la media nacional, donde fue del 0,53%.

Sin embargo, la región todavía tiene 18.719 cotizantes menos que el año pasado por estas fechas (-4,67%) y 5.661 menos que en febrero, inmediatamente antes del comienzo de la pandemia.

Hay que tener en cuenta que, al tratarse de afiliación media, las cifras de abril están condicionadas por la paralización de la actividad durante buena parte del mes, tal como ocurrió en marzo tras la declaración del estado de alarma y el confinamiento a partir del 14 de marzo.

De hecho, según las estadísticas oficiales el último día de marzo había en Extremadura 373.119 afiliados a la Seguridad Social tras el desplome que se inició el 12 de marzo, mientras que a 30 de abril eran 375.359, lo que ya evidenció una cierta recuperación. Para conocer la cifra de mayo hay que esperar a mediados de junio.

Del total de afiliados, 31.910 están afectados por una situación de suspensión total o parcial por expedientes de regulación temporal de empleo –a fecha 30 de abril, primer mes completo con el estado de alarma por el coronavirus, eran 39.889–, y en 28.429 de estos casos –37.145 en abril– estaba motivado por causas de fuerza mayor, recoge Efe.

El secretario general de Empleo de la Junta de Extremadura, Javier Luna, destacó la recuperación del empleo gracias al impulso principalmente de la construcción y de la agricultura.

Luna recalcó que el paro baja en la región en todos los sectores económicos, excepto en el colectivo sin empleo anterior. Los sectores que han causado esta mejor evolución han sido la construcción y el agrario, y en servicios gracias al comercio y la hostelería. También se observan bajadas en la industria gracias al sector agroalimentario, estos últimos con mayor intensidad que el año anterior.

En cuanto a las contrataciones, indicó que se han firmado 39.701 contratos, con un incremento del 42,04% respecto al mes de abril, crecimiento tanto de temporales (42,37% más), como de indefinidos (30,46%).

Por otro lado, la reducción en el paro se observa en todas las comarcas y ciudades de Extremadura, concentrando las mayores bajadas en las Vegas Altas y Bajas del Guadiana, Tierra de Barros y Campo Arañuelo.

En cuanto a los ERTE, apuntó que abarcan a 10.500 empresas de la región, si bien 4.511 son personas físicas, normalmente autónomos. El número de trabajadores afectados son 47.174. En mayo 4.423 personas volvieron a la actividad desde un ERTE.

La Confederación regional empresarial extremeña (Creex) reconoce que los datos son positivos, pero ante la mala evolución interanual reclama apoyo a las empresas para garantizar la recuperación y así mantener o incluso crear empleo.

Por su parte, CCOO estima que las medidas surgidas del diálogo social, como los ERTE y la liquidez para las empresas, han permitido mitigar los daños en el empleo. UGT muestra un moderado optimismo, ya que los buenos datos del paro se dan en un contexto de retraso de campañas agrícolas y actividad aún reducida.