La inversión en mantenimiento de vías férreas cayó a la mitad durante la crisis
El Gobierno pasó de cerca de 17 millones de euros en la región en el año 2011 a menos de 8 millones en 2015
La inversión en el mantenimiento de vías de ferrocarril en la región se redujo a la mitad entre los años 2011 y 2015, en el periodo de la crisis económica. En concreto, pasó de cerca de 17 millones de euros a algo menos de 8 millones. Así lo indica el Gobierno en una respuesta remitida a una pregunta por escrito realizada por los diputados extremeños del PSOE en el Congreso de los Diputados.
César Ramos, Pilar Lucio (diputados socialistas por Cáceres), Marisol Pérez e Ignacio Sánchez Amor (parlamentarios por Badajoz) registraron en enero de este año una pregunta dirigida al Gobierno en la que pedían información sobre las obras de mantenimiento de vías férreas que se realizaron en ambas provincias entre los años 2011 y 2015, con los importes desglosados por cada anualidad.
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La respuesta del Gobierno, que se ha dado a conocer esta semana, indica que los costes de mantenimiento ascendieron en el año 2011 a 7,3 millones de euros en la provincia de Cáceres y 9,6 millones en Badajoz. Un año después bajaron a 2,8 millones en el primer caso y 9,4 en el segundo; mientras que en 2013 se situaron en 3,6 millones y 7,3 millones, respectivamente.
Las cifras siguieron cayendo en 2014. Según el Gobierno, en ese ejercicio los gastos en mantenimiento llegaron a 3,4 millones en Cáceres y más de 5,4 millones en Badajoz. Por último, en 2015 fueron de algo más de 3 millones en la provincia cacereña y 4,9 en la pacense.
En conclusión, en toda la región se pasó de casi 17 millones de euros en 2011 a 12 millones en 2012, cerca de 11 en 2013, 8,9 en 2014 y casi 8 millones en 2015. La reducción fue por tanto superior al 50% en solo cuatro años.
Manifestación en Madrid
La situación del servicio ferroviario en la región, tras los más de veinte incidentes registrados en el último mes, fue ayer objeto de análisis en la reunión del Pacto por el Ferrocarril que tuvo lugar en Mérida. Los integrantes del acuerdo, agentes políticos y sociales, acordaron iniciar movilizaciones que culminarán con una manifestación en octubre en Madrid para reclamar un tren de calidad en Extremadura.
En el encuentro estuvieron presentes el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara; la consejera de Medio Ambiente y Rural, Begoña García Bernal, junto a miembros de su equipo; la presidenta de la Diputación de Cáceres, Rosario Cordero; el vicepresidente segundo de la Diputación de Badajoz, Ramón Ropero; el presidente de la Fempex, Francisco Buenavista y representantes de PSOE, PP, Podemos y Ciudadanos; así como de los sindicatos CCOO y UGT y la patronal Creex.
Según recoge Efe, la consejera de Medio Ambiente, que tiene las competencias en transporte, indicó que en la reunión que celebrará mañana con el presidente de Renfe exigirá un calendario para la sustitución del parque móvil, que no puede condicionarse al desarrollo de las infraestructuras, y un informe oficial de las incidencias de las últimas semanas.
A partir de ahí, septiembre será un mes para sensibilizar «por qué, para qué y hacia dónde» va el pacto, para que los ciudadanos extremeños, al margen de si usan o no el tren, conozcan lo que ocurre con el servicio ferroviario con el objetivo de poder movilizarlos.
En la primera sesión plenaria del curso político se intentará suscribir una declaración institucional en la Asamblea, que se remitiría al Ministerio de Fomento. El 7 de septiembre, con motivo del Día de Extremadura, se creará un foro de alcaldes.
García Bernal anunció que en octubre habrá una gran manifestación en Madrid, para la que buscarán la complicidad de las casas regionales extremeñas y de gobiernos y entidades de Castilla y León, Castilla-La Mancha y Portugal.
La consejera afirmó que Extremadura no se va a quedar «parada y callada» ante la situación del servicio ferroviario, que afecta a la imagen de la región, su dignidad y su seguridad. A su juicio, es una vergüenza que se haya visto a viajeros con sus maletas caminando campo a través a 40 grados de temperatura y a bebés y mayores en coches de la Guardia Civil después de que el tren les dejara tirados.
En la reunión también se acordó que el Instituto de Consumo de Extremadura inicie acciones legales para que los afectados por los incidentes no se vean desamparados ante Renfe.
Partidos políticos, sindicatos y patronal coincidieron en el diagnóstico de la situación y en las medidas a poner en marcha desde una posición reivindicativa firme.
En la manifestación de Madrid no está asegurada la presencia del PP, lo que dependerá de los avances que pueda haber con Renfe y de cuestiones como el lema, según advirtió su diputado regional Víctor del Moral al término de la reunión.
Aunque mostró la indignación del PP por los incidentes y su beligerancia en este asunto, indicó que llegado el momento se estudiaría si se suman «a esas manifestaciones, dónde, cómo son, con qué pancarta y con qué lema», porque el deterioro viene de muchos años por la desatención «de todos».