El incremento del cultivo de arroz dispara los seguros agrarios contratados

Aunque haya aumentado la superficie cubierta de cereales de invierno (trigo, cebada, centeno...), lo relevante de los seguros agrarios en el pasado año llega gracias al arroz sobre todo, y en menor medida a los llamados cultivos mejorantes (avena, guisantes, vezas...) que exige la nueva PAC, y que debieron sembrarse el año pasado para cumplir con la rotación de cultivos y cobrar las ayudas europeas, explica a HOY Jesús González, técnico de seguros de Cooperativas Agro-alimentarias de Extremadura.

De forma general, la contratación de 2024 en Extremadura ha aumentado con respecto a 2023. El capital asegurado creció un 4,23%, hasta los 1.363,24 millones. Este crecimiento viene impulsado por el aumento de contratación de los cultivos herbáceos, cuyo capital asegurado se incrementó en más de un 75%, hasta los 222,50 millones.

«2023 fue un año de sequía y cultivos como el arroz apenas se pusieron por falta de agua. No se pasaron de las 5.000 hectáreas. En 2024 se pudo sembrar medio normal y las hectáreas arroceras subieron hasta las 19.000. Y con ellos, más pólizas y capital asegurado», reseña González.

La estadística dice que también que aumentó el capital asegurado en conjunto de las hortalizas, cuyo aseguramiento subió un 3,86% hasta superar los 340 millones. Hay que recordar en este terreno el incremento de la superficie cultivada de tomate en unas 1.000 hectáreas respecto al año 2023.

Además, también creció el capital asegurado de otros seguros como el de cultivos industriales no textiles (que incluye al tabaco), que lo hace en más de un 25%; los seguros forestales (+8) y ligeramente el olivar, un 0,77%. Por el contrario, los frutales, aunque se mantuvo en cifras similares, su capital bajó en un 2,5%.

En cuanto al número de pólizas, se mantuvo estable, con un ligero descenso del 0,11%. Se suscribieron 29.214 en Extremadura, 33 menos que en el año anterior. Tal y como ocurre con el capital asegurado, se incrementó la contratación de hortalizas (un 3,8%) con 1.904 declaraciones de seguro; los cultivos herbáceos extensivos (+14,1%) con 5.344 pólizas; o los industriales no textiles (+1,2%) con 823 pólizas.

 

En cuanto a la superficie asegurada total, fueron 310.500 hectáreas, un 9,3% más el año pasado.

El impulso de este crecimiento recayó fundamentalmente otra vez en los cultivos herbáceos, cuya superficie subió más de un 28%, con 152.200 hectáreas aseguradas. Por su parte las hortalizas incrementaron su superficie asegurada en casi un 2% hasta las 26.190 hectáreas.

Para Agroseguro, «el impulso» de la contratación se apoya en «la actual realidad climática –que causa siniestros cada vez más frecuentes y graves–, la protección frente a los accidentes y enfermedades que sufre el ganado de manera habitual, y el apoyo de las administraciones al seguro».

Jesús González avanza que para esta campaña agroganadera no prevé movimientos notables en el aseguramiento agrario en Extremadura. La superficie arrocera se mantendrá pero bajará la tomatera. Con todo, González incide en una «realidad evidente. Y es que son mucho más caros».

«Entendemos que Agroseguro tiene que ser una entidad solvente y los sistemas de reaseguro y estabilización, suficientes. Pero es necesario que las modificaciones sean cautelosas y no echen a asegurados fuera del sistema, ya que la mayoría de los sectores sólo se pueden proteger mediante la contratación del seguro agrario, estabilizando sus rentas en caso de siniestros», remarca el técnico de seguros de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura.