

Secciones
Servicios
Destacamos
Ana B. Hernández
Jueves, 11 de julio 2024, 12:38
María Guardiola se prepara para gobernar Extremadura en solitario si finalmente Vox ejecuta su amenaza y rompe el pacto con el PP. Una posibilidad ... que hasta el momento los populares no contemplaban, pero que después del último comunicado de Santiago Abascal consideran que se presenta como el escenario más realista.
Tras la Conferencia Sectorial de Infancia y Familia, celebrada ayer en Tenerife y en la que Extremadura aceptó la acogida de 30 menores migrantes no acompañados, la formación de ultraderecha ha acusado al presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, de «romper los pactos de gobierno regionales al haber obligado a los presidentes autonómicos a votar sí al reparto de 400 menas«.
Vox culpa al PP y parece que da por hecho la ruptura de los acuerdos en las cinco comunidades en las que ambos partidos gobiernan en coalición, entre ellas Extremadura. Aunque la decisión definitiva no la comunicará hasta esta tarde. A las 18.30 horas ha convocado a su comité nacional «para acordar los próximos pasos».
Este comunicado, lanzado anoche tras la sectorial, ha generado desconcierto en el PP extremeño y en el ejecutivo de Guardiola. Fuentes del partido reconocen que no creían que la amenaza de ruptura por parte de Vox, que ha repetido con claridad en los últimos días, llegara al punto en el que está ahora. No especialmente, añaden, en una región en la que los dos partidos han dejado fuera del pacto de gobierno cualquier asunto relacionado con la política migratoria.
«Nuestro acuerdo tiene 60 puntos que estamos cumpliendo escrupulosamente y que vamos a seguir haciendo», ha declarado esta mañana la presidenta extremeña. Aunque ha reconocido que no sabe qué va a hacer Vox, «he preguntado a compañeros de la formación en la región y no lo saben», ha dicho que está «muy tranquila» y que para ella «lo deseable sería que los políticos velemos por el interés de la región, pero no sé si esto es lo que piensa Vox o va a obedecer órdenes de su dirección nacional».
María Guardiola ha defendido la acogida de menores migrantes no acompañados, «somos un gobierno serio que cumple sus compromisos en asuntos importantes para todo el país y que cree en la solidaridad interterritorial», y ha garantizado que «seguiremos trabajando con los mismos valores y líneas rojas, que continúan siendo las mismas desde el primer momento».
También ha dejado claro que con los presupuestos aprobados hay margen para gobernar y ha instado a Vox a explicar la ruptura si finalmente se decanta por ella. «No me voy a adelantar más porque no sé qué hará Vox en Extremadura», ha dicho la presidenta extremeña esta mañana en un acto celebrado en Cáceres.
Pero lo cierto es que, tras el desconcierto inicial, los populares barajan un gobierno en solitario de María Guardiola, si Vox no recula, lo que tampoco descartan, y lo hacen con más optimismo que desánimo.
La salida de la ultraderecha del gobierno extremeño se presenta ahora como una oportunidad para que Guardiola pueda romper con el partido con el que nunca quiso pactar, una ocasión para sacudirse el vínculo que sirve de principal arma de oposición a la izquierda y que lastra la imagen moderada que la presidenta extremeña se afana por personalizar.
«Creemos que Vox no ha pensado de forma adecuada una estrategia que les debilita y fortalece al PP», opinan los populares. «Quieren romper por un asunto que no está en el pacto extremeño, pero que además cala en la conciencia de la gente, estamos hablando de menores que se ven obligados a salir de sus países».
En el PP están pasando ahora de no temer la ruptura a valorarla. «Se puede gobernar en minoría. Vox podría ponernos zancadillas, pero no dejar caer a Guardiola y permitir que la izquierda recupere la Junta». Además, siempre está la opción de un adelanto electoral. «Si se demuestra que la región es ingobernable, hay que pasar a ese escenario». Y en él también creen que la presidenta saldría reforzada frente a Vox y ante un PSOE en horas bajas, con su secretario general y presidente de la Diputación Provincial de Badajoz afectado, aunque fuera de la querella, por la causa judicial abierta contra el hermano de Pedro Sánchez.
Aun así los populares extremeños no terminan de creerse que Vox rompa el pacto extremeño. Sin una cita electoral a la vuelta de la esquina, perdería la influencia y visibilidad que da estar sentado en un consejo de gobierno, pese a que el rédito que de ello están obtenido en la región es limitado. Es precisamente este el motivo que alegan quienes defienden que la ruptura permitiría a los de Abascal defender su ideario con más fuerza, marcando distancias con el PP y contrarrestando el avance del partido de Alvise.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones de HOY
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.