Extremadura necesita expertos en ciberseguridad, desarrollo web y gestión de proyectos

Tras este primero, aparecen otros cinco: experto en ciberseguridad, desarrollador web y profesionales de lenguaje de programación, bases de datos y 'cloud computing' (computación en la nube). Otros en los que también hay dificultades para contratar son los relacionados con 'frameworks' y herramientas, arquitectura y diseño de software, seguridad, análisis y 'big data', inteligencia artificial o desarrollo de aplicaciones y servicios.

Estas son algunas de las «necesidades críticas» detectadas en el estudio, explica la Asociación Empresarial Extremeña de Tecnologías de la Información y la Comunicación (Aextic), que detalla que este déficit está ocasionando un perjuicio al día a día de estos negocios. Siete de cada diez admite retrasos en los proyectos y aprecia escasez de candidatos cuando busca talento, y casi la mitad refiere dificultad para innovar.

Este problema, apunta el colectivo, puede solventarse «con formaciones específicas». «Hablamos de empleos de calidad, que en gran medida se realizan de forma remota y con flexibilidad, que encajan a la perfección con lo que nuestra región necesita, que es fijar población en las zonas rurales».

Según Carlos Rodríguez, vicepresidente de Aextic, «la escasez de perfiles profesionales con las competencias necesarias lastra el crecimiento de nuestras empresas y también nuestra capacidad competitiva». «El estudio –continúa– plasma que esta preocupación es compartida por la práctica totalidad del sector: tenemos una capacidad de crecimiento potencial enorme y para ello necesitamos contratar, y queremos hacerlo aquí, para que nuestra actividad repercuta de forma positiva en todos nuestros territorios, la cuestión es que nos cuesta encontrar hombres y mujeres que puedan ocupar los puestos que necesitamos cubrir».

«Nos esforzamos por tratar de resolverlo –expone Rodríguez– a través de formaciones internas y acciones de atracción y retención del talento, pero eso es claramente insuficiente: necesitamos más personas preparadas si queremos seguir creciendo como empresas y generando riqueza en Extremadura».

En la encuesta han participado ocho de cada diez empresas asociadas, «además de cinco grandes tecnológicas con centros de trabajo en nuestra región», detalla Aextic. La mayoría de las participantes se dedican a la venta de servicios Tecnologías de la Información y la Comunicación, en particular «el desarrollo de software y aplicaciones, seguido de los servicios de tecnologías de la información, aunque el marketing digital también es un área significativa de actividad». El 60% de los proyectos de estas empresas se dirigen al mercado nacional, y el 26%. al regional.

Los resultados de la investigación «se han trasladado a todas las instituciones competentes en materia de formación y capacitación en la comunidad, con el objetivo de impulsar soluciones conjuntas público-privadas que permitan cubrir los perfiles y las necesidades detectadas». «De hecho –añade la asociación–, ya se han compartido con la Junta de Extremadura, en concreto con la secretaria general de Transformación Digital y Ciberseguridad y con la dirección de formación para el Empleo, con una acogida positiva».

Según Juan Miguel Trejo, presidente del colectivo, «no todos los perfiles que necesitamos tienen que venir de ingenierías o matemáticas». «Por ejemplo, para la dirección de proyectos es importantísima la organización, visión de conjunto, comprensión de lo que necesita el cliente, resolución de conflictos o saber gestionar plazos de entrega y presupuestos».

Algunas de estas virtudes forman parte de lo que en ocasiones se denomina habilidades blandas, que constituyen otro de los déficits del mercado laboral extremeño para las empresas dedicadas a las Tecnologías de la Información y la Comunicación. «El cien por cien de las empresas encuestadas –concretan sus autores– subrayan la importancia de estas habilidades, especialmente la comunicación efectiva, el trabajo en equipo y la resolución de problemas, ya que la falta de ellas puede obstaculizar la colaboración interna y reducir la productividad». En este mismo capítulo también figuran la capacidad de adaptación y flexibilidad, y el aprendizaje continuo.