En Extremadura se compraron 35 viviendas al día en el primer semestre del año

La relajación de las condiciones hipotecarias, de la mano de la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), fomenta el calentamiento del mercado. La última bajada aprobada por el regulador, precisamente en el mes de junio, deja los tipos de interés más de dos puntos porcentuales por debajo de lo que estaban hace un año.

Hipotecas con tipos más bajos y precios de los inmuebles que se mantienen al alza, aunque en Extremadura más baratos que en otros territorios, favorecen el dinamismo del sector. Durante el presente ejercicio, según los datos del INE (Instituto Nacional de Estadística), se han firmado una media de 729 hipotecas mensuales sobre viviendas en la región; el año pasado no se alcanzaron las 600 de media, y en el primer semestre de 2024 se quedaron por debajo de las 530.

En este contexto, se han cerrado 6.329 operaciones de compraventa de viviendas en Extremadura, una media de 35 diarias, entre enero y junio del presente ejercicio. Se trata de la cifra más elevada para la primera mitad de un año desde 2008 y supone un incremento del 25,8% respecto al mismo periodo de 2024.

Se mantiene, por tanto, la tendencia al alza del mercado de vivienda que, con ligeros altibajos, se constata en la región desde que se tocara suelo en el volumen de operaciones anuales en los años 2014 y 2015.

El comportamiento del mercado inmobiliario es muy similar a nivel nacional. En todas las regiones, a excepción de Navarra, el número de transacciones se ha movido al alza, pero el aumento en relación a 2024 es del 19,7% en la media del país, seis puntos inferior al extremeño. Tan solo en Castilla y León (31,4%), La Rioja (30,3%) y Castilla-La Mancha (26,7%) se registran tasas superiores a la de Extremadura.

Prácticamente nueve de cada diez operaciones, el 88% del total, se firmaron sobre inmuebles usados en los primeros seis meses del año. Se trata de una proporción que es habitual en los últimos años. Una muestra de la escasez de vivienda de obra nueva que tiene la región. Por ejemplo, en el año 2013, con toda la oferta derivada del 'boom' de la construcción de los años anteriores, las compraventas se repartían al 50% entre vivienda nueva y usada.

La reactivación, después de la pandemia, del sector de la construcción conlleva que las 757 viviendas nuevas que se han vendido en la primera mitad de 2025 sean la cifra más elevada en su segmento desde hace más de una década. Nada que ver, pese a todo, con las más de 2.000 viviendas nuevas que se vendían cada seis meses en Extremadura durante 2008, 2009 y 2010, con algún semestre incluso en el que se rozaron las 2.500 transacciones.

Esas compras de inmuebles a estrenar suponen un incremento del 29% respecto al mismo periodo del año pasado, lo que supone un importante tirón para el mercado inmobiliario.

En cuanto al mercado de segunda mano en el presente ejercicio, registra un 25% más de operaciones que el año pasado y se queda cerca de las 5.600 transacciones. No se vendían más de 5.500 viviendas usadas en la región en un semestre desde 2007.