Clausí se viste de héroe en el 93

Sobre el césped se enfrentaban dos equipos con planteamientos diferentes. El cuadro cacereño ponía a su equipo de gala, con Clausí llevando el timón, mientras que Adri Pérez y Salinas eran los encargados de aportar la velocidad en ataque. Por el lado del Colonia Moscardó, un recién ascendido que había empezado el campeonato con derrota, la idea era montar una defensa rocosa formada por Recalde, Telis y Sebas como centrales para intentar frenar las acometidas de la escuadra verdiblanca.

El encuentro comenzó con un ritmo muy alto. Fran Viñuela estuvo a punto de abrir el marcador, aunque la defensa del cuadro rojiblanco estuvo muy atenta para desviar el balón a córner y evitar el tanto del extremo del Cacereño. El Moscardó dio la réplica con buenas internadas desde la banda derecha con balones peligrosos de Dani Cuevas y Mba que blocó Diego Nieves con mucha seguridad.

Los palos se encargaron de que los goles tardaran en subir al marcador. Primero fue el local Dani Segovia el que se topó con la madera y luego Salinas, por parte del equipo extremeño, estrelló el balón contra el poste tras recibir un centro de Fran Viñuela.

Pese a las buenas llegadas de ambos equipos, el partido llegó al descanso con el resultado inicial. Los dos contendientes se marcharon a los vestuarios con buenas sensaciones y con un gran ambiente entre las dos aficiones en las gradas del Román Valero.

El inicio de la segunda parte sirvió para teñir el partido de verde. El Cacereño sumó muchos lanzamientos a balón parado que eran repelidos por la defensa del Moscardó y Clausi pudo hacer el 0-1 con un remate de volea que se fue alto. Tras un gran inicio de los hombres de Cobos, llegó el golpe del conjunto madrileño. Nader puso un balón al corazón del área donde apareció Dani Segovia para mandar el balón al fondo de la portería.

Tras el 1-0 el Cacereño peleó en busca del empate. Aunque el cuadro verdiblanco trató de subir el ritmo del partido, un fuerte golpe sufrido por Guille dejó el encuentro en pausa durante varios minutos y el meta del Moscardó tuvo que ser finalmente sustituido. El partido empezaba a tener algo de brusquedad y las faltas se sucedían por ambos bandos. En uno de esos lanzamientos a balón parado apareció Adri Pérez para transformar una falta en un auténtico golazo.

El tanto, en lugar de hundir al Moscardó, pareció dar alas a los locales, que hubieran podido ponerse de nuevo en ventaja si Samu Guillén lograra marcar un remate de chilena que salió fuera por poco. El Cacereño, impulsado por los muchos aficionados que se habían desplazado hasta el madrileño barrio de Usera, peleaba también por ese tanto que le diese los tres puntos.

Todo apuntaba a que el partido iba acabar en empate hasta que, en el tiempo extra, Clausí enganchó una volea en la frontal del área para hacer el gol de la victoria y desatar el delirio en la expedición verdiblanca.

El triunfo sirve al Cacereño para sumar su segunda victoria y mantenerse en lo más alto de la tabla.