«Me gusta mi trabajo, me gusta ayudar a las murgas»

Toni Martín lleva 15 años en el puesto de regidora. Coordina el sonido y la colocación de los escenarios. Las murgas tienen muy poco tiempo para colocar y desmontar su puesta en escena y además deben llevarlo y recogerlo el día que actúan en el teatro. Para que todo salga bien, la clave es la coordinación. «Ha mejorado mucho. Antes había mucha gente, se dejaban los escenarios en el patio. Era un peligro. Ahora todo está más controlado y se trabaja mejor y con más seguridad», dice Martín.

Esta profesional agradece la letra de Los Mirinda y otras menciones que ha recibido, pero es muy discreta y asegura que es un trabajo en equipo. «Me gusta mi trabajo, me gusta ayudarles. Es eso», asegura.

Uno de sus talentos es que es capaz de atender a los murgueros cuando más nerviosos están, los minutos previos a cantar. «Les haces una broma o les dices algo y consigues que se tranquilicen», dice Toni.

En sus años de regidora del concurso ha vivido ciento de anécdotas pero recuerda especialmente una mítica, la caída de un extra de Los Chungos. Estaba disfrazado de buda y subido a una plataforma en la que parecía que levitaba. «Vimos que se iba resbalando, no se si se durmió y pum, se cayó en medio de la actuación», recuerda. También ha vivido retos complicados porque cada vez los escenarios son más complejos y voluminosos.