El terreno municipal para equipamientos sigue baldío, sin ninguna utilidad

Durante muchos años, el Ayuntamiento y la asociación de industriales Apilca estuvieron en conversaciones para dar utilidad a la denominada parcela cero, un terreno de propiedad municipal ubicado en la calle Esquiladores, de 6.500 metros cuadrados. Es la mitad del rectángulo de suelo que linda con las calles Hilanderas, Herreros y Toneleros. La propiedad municipal linda con el edificio de la Unidad de Mediación, Arbitraje y Conciliación de la Junta de Extremadura. La otra parte del rectángulo, que da a la calle Herreros, de 6.500 metros cuadrados, es de propiedad privada y está también sin construir.

El Ayuntamiento contempló la cesión de uso de su parcela cero a Apilca en 1996, pero no puso en marcha el proceso hasta 2001, cuando se hizo cargo del polígono. El gerente de la asociación de industriales recuerda que entre 2002 y 2005 se trabajó en la cesión y un diseño de edificio de servicios, de dos plantas, con cafetería, aulas de formación, guardería, oficina bancaria, consultorio médico, restaurante y gasolinera. También se llegó a prever un hotel, pero en 2006 el Consistorio señaló que al ser una parcela de equipamiento social no podía tener usos sociales, como de restaurante y de gasolinera. Sin estas dotaciones más atractivas en cuanto a ingresos de explotación, Apilca no podía asumir la inversión, cifrada en casi un millón de euros, y más con la inmediata llegada de al crisis económica. El Ayuntamiento llegó a anunciar en 2006 que cambiaría el uso en el nuevo Plan de Urbanismo, pero ya era tarde con el desplome de la economía.