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Juan Carlos Barra lleva dos años y medio encarcelado. :: HOY
El Supremo confirma 38 años de cárcel para el asesino de sus padres

El Supremo confirma 38 años de cárcel para el asesino de sus padres

Juan Carlos Barra acabó con la vida de sus progenitores en Cáceres y huyó con 5.600 euros que gastó en tres días en drogas y prostitutas

Sergio Lorenzo

Jueves, 29 de octubre 2015, 00:44

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Se ha terminado. Juan Carlos Barra ya no puede ir a más tribunales diciendo que es inocente, que él no acabó con la vida de sus padres el 17 de marzo de 2013.

El Tribunal Supremo ha confirmado la condena de 38 años de prisión que le impuso la Audiencia de Cáceres en diciembre del año pasado, después de que los nueve miembros del jurado decidieran, por unanimidad, que era culpable de dos delitos de asesinato con alevosía , con la agravante de parentesco.

Juan Carlos Barra, que tiene 40 años, volvió a vivir con sus padres una vez que se divorció. Fue condenando por maltratar a su exmujer. Vivía con los padres en una vivienda unifamiliar en el barrio cacereño de La Mejostilla. Estaba en paro, seguía consumiendo drogas, y se sentía molesto porque su padre no le empleaba en el negocio familiar, una pequeña empresa de bolsas de plástico. Según ha quedado probado tras el juicio, a las seis de la mañana del 17 de marzo, Juan Carlos Barra llegó a la casa de sus padres después de consumir cocaína y marihuana. Decidió acabar con la vida de sus progenitores y bajó al garaje para coger la escopeta de caza del padre. La montó, la cargó con dos cartuchos y subió al dormitorio del padre, que estaba en la cama leyendo. Se situó cerca de él y le disparó en el estómago. Luego fue al dormitorio de la madre, y la mató de un disparo en la cabeza. Al regresar al dormitorio del padre, vio que estaba agonizando e intentó asfixiarle con un cojín. Al no poder, cogió un cuchillo de la cocina y le asestó varias puñaladas en el cuello. Luego huyó con 5.600 euros que estaban en la casa. Compró cocaína y se marchó a Zafra en donde se gastó el dinero en tres días, en droga y prostitutas.

El asesinó tiene cinco hermanos que contrataron al abogado José Galán, que mantuvo en el Tribunal Supremo que había pruebas suficientes para mantener la condena de 38 años de prisión.

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