El TSJEx reconoce que el calor impide trabajar en condiciones óptimas en los juzgados de Badajoz

El problema fue dado a conocer este martes por los sindicatos de Justicia, que amenazan con parar la actividad en el momento que la temperatura en el interior supere los 27º que se consideran razonables para trabajar.

Desde el TSJEx se indica que la presidenta de este tribunal, María Félix Tena, ha trasladado en reiteradas ocasiones al Ministerio de Justicia que «desde el traslado de los juzgados a la nueva sede judicial la climatización del edificio es deficiente y no permite trabajar en condiciones óptimas, menos aún cuando las temperaturas comiencen a subir y teniendo en cuenta el clima de Badajoz».

De momento, los sindicatos de Justicia suspendieron el paro previsto para este miércoles tras comprobar que las temperaturas habían bajado, pero amenazan con llevar a cabo esa medida de presión tan pronto como vuelva el calor.

Precisamente este jueves está previsto que los técnicos de la marca a la que pertenecen los aparatos de climatización instalados y el arquitecto de ese edificio visiten las instalaciones para tratar de encontrar una solución al problema.

Este martes, a las 12.00 del mediodía, el termómetro medía 36º centígrados en la tercera planta del edificio. «Y hemos tenido días en los que se han alcanzado los 39», denuncian los representantes sindicales.

La queja se repite desde que los juzgados comenzaron a funcionar a comienzos de noviembre. Pero los sindicatos decidieron dar un margen a los responsables del edificio para que solventaran los desajustes detectados en el sistema de climatización. «Hemos esperado, pero los funcionarios ya no soportan más este calor. Es necesario que se solucione con urgencia».

Recuerdan los sindicalistas que el proyecto que se ha llevado a cabo contemplaba un sistema de climatización que, teóricamente, permitiría mantener el edificio con una temperatura adecuada sin necesidad de realizar un gran gasto energético. Esa es la razón por la que muchos de los despachos no tienen ventana al exterior.

Pero la realidad ha demostrado que esas corrientes naturales de aire son incapaces de mantener una temperatura adecuada. A ello se une que hay dependencias del edificio en las que el aire acondicionado no consigue mitigar los efectos del calor.

Con la intención poner cifras a esa sensación de bochorno hace tiempo que están midiendo la temperatura. La última vez que lo hicieron fue la pasada semana y las conclusiones resultaron alarmantes puesto que se superaron los 30 grados en muchas de las dependencias