Un joven se enfrenta a 20 años de cárcel por prostituir a una menor en Badajoz

Un hombre de unos 30 años de edad se sienta desde este martes en el banquillo de la Audiencia Provincial de Badajoz para responder de los presuntos delitos cometidos sobre una chica menor de edad de la que habría abusado sexualmente tras inducirla a la prostitución.

El juicio comenzó con la declaración del acusado, que según indicó su letrado, Alfredo Pereira, no puede ser condenado por esos hechos porque «ni siquiera conoce a esa chica».

Después testificó la supuesta víctima, una chica menor a la que el acusado dobla en edad. Entre ella y el procesado fue colocada una mampara para evitar que mantuvieran contacto visual dentro de la sala.

El juicio se celebró a puerta cerrada para salvaguardar la intimidad de la víctima, pero en el escrito de acusación realizado por la Fiscalía de Badajoz se recogen los motivos por los que se juzga al procesado.

En ese relato se indica que entre los meses de junio y noviembre de 2018 el acusado conoció a la chica, que entonces tenía 14 años, entablando con ella una relación estable de trato personal por la que consiguió cautivar su voluntad ofreciéndole, en al menos cinco ocasiones, la entrega de dinero o de sustancias estupefacientes (hachís y marihuana) a cambio de mantener con él encuentros de carácter sexual.

Cuando eso ocurrió la menor consumía este tipo de sustancias pero carecía de medios económicos para su adquisición en el mercado clandestino, razón por la que habría accedido a realizar diversas prácticas de naturaleza sexual.

Esos contactos los habrían mantenido en distintos inmuebles de la ciudad de Badajoz donde el acusado le exigió la práctica de una felación o mantener relaciones sexuales completas que llegaron a consumarse. Esos hechos perturbaron, de modo sensible, a la víctima. La Fiscalía no ha podido determinar el valor de las sustancias que entregó el acusado a la chica a cambio de mantener esos encuentros sexuales, pero estima que el valor de la droga pudo rondar los 25 euros.

Estos hechos han sido considerados un delito continuado de abuso sexual en relación con un delito continuado de corrupción y prostitución y un delito contra la salud pública.

Para el delito de abuso sexual continuado solicita la Fiscalía 11 años de prisión, una inhabilitación especial para cualquier profesión u oficio que conlleve contacto regular y directo con menores de edad durante 15 años, y la prohibición de aproximarse al domicilio, centro docente o centro de trabajo de la menor durante 15 años, además de una medida de libertad vigilada de 10 años posterior al cumplimiento de la pena de cárcel.

Por el delito de corrupción solicita otros 5 años de prisión y 10 años de libertad vigilada.

Finalmente, por el delito contra la salud pública se proponen otros 4 años de prisión y el pago de una multa de 50 euros (el doble del valor de la droga que entregó a la joven).

Además, la acusación pública solicita que en concepto de responsabilidad civil el acusado indemnice a la menor con 18.000 euros por los daños morales causados.

El juicio en el que van a ser vistos estos hechos comenzó este martes en la Audiencia Provincial de Badajoz y concluirá con una segunda vista este jueves.