El alcalde de Badajoz descarta promover medidas urgentes que mejoren la seguridad del Casco Antiguo
Ignacio Gragera insiste en que hay presencia de la Policía Local diaria en la zona histórica, pero avisa que no hay «fórmulas mágicas» ni soluciones a corto plazo
El alcalde, Ignacio Gragera, admite que es muy difícil atajar la venta de drogas en el Casco Antiguo. La única vía para ello, cree, es ... que todas las administraciones «vayan de la mano» en la lucha contra el narcotráfico.
La proliferación de fumaderos atrae a toxicómanos de otras localidades, como desveló HOY este fin de semana. Los nuevos puntos de venta de droga han provocado un aumento de personas durmiendo en bancos y esquinas, así como un incremento de los incidentes con vecinos.
«No hay una solución a corto plazo si no existe una voluntad decidida por parte de todas las administraciones, y, ni siquiera existiendo, se pueden prometer cosas que no están en nuestra mano», respondió el alcalde a las preguntas de HOY por la alarma que se extiende entre sus calles.
De esta manera, el alcalde descarta emprender un plan específico desde el Ayuntamiento con el que pueda atajar los crecientes problemas del barrio y que inquietan a vecinos y empresarios.
«Proliferación de puntos de venta de drogas: no es fácil acabar con ello. Y esto lo sabe la Delegación del Gobierno y la Policía Nacional, que son quienes tienen que luchar contra ello. ¿Por qué? Porque depende también de la Fiscalía y de la Judicatura». Gragera puso como ejemplo las dificultades para acceder a una de esas propiedades para realizar registros.
El alcalde aseguró ayer que el Ayuntamiento hace lo que puede, con presencia diaria por parte de la Policía Local en el Casco Antiguo. Y emplaza a los vecinos que tengan incidentes a que llamen al teléfono 112, que se encarga de coordinar los servicios de emergencia, para evitar sentirse desamparados si en ese momento los agentes no pueden acudir.
«La Policía Local está todos los días en el Casco Antiguo. Cualquier vecino, por muchos que algunos digan que no, ve patrullas de la Policía Local y agentes a pie», afirmó. Aunque insistió en que la lucha contra el tráfico de drogas y el control de la seguridad ciudadana depende de la Policía Nacional, y que el cuerpo municipal colabora con este.
Ignacio Gragera insistió en que el Ayuntamiento está llevando actividades a la parte histórica. Pero también ha afirmado: «Si queremos decirle que esto se soluciona chasqueando los dedos, bueno... obviamente es una pelea a medio y largo plazo».
«Estoy empeñado en recuperar el Casco Antiguo en la parte que nos toca de manera directa, pero es una pelea a medio y largo plazo que estoy dispuesto a luchar y a ganar», aseveró.
El alcalde argumentó que su labor será involucrar al resto de administraciones para que sean conscientes de la realidad que se vive en el Casco Antiguo. «Esta es una pelea que nos compete a todos», dijo Ignacio Gragera, que pide deslindar la situación de la zona histórica del debate político.
Incidió en que la Delegación del Gobierno es consciente de las necesidades del barrio y de las peticiones que ha realizado en los últimos tiempos, así como que mantiene un contacto permanente con la Policía Nacional y con la Delegación del Gobierno.
A pesar de los últimos incidentes, Gragera valora que los pacenses puedan subir a la Plaza Alta, algo que no se podía hacer hace décadas. Pero también incide en que es una «situación cíclica» y que hace cuatro años se dio también un momento problemático para la barriada. «Pido a la gente que entienda que las fórmulas mágicas no existen».
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o.
El alcalde, Ignacio Gragera, admite que es muy difícil atajar la venta de drogas en el Casco Antiguo. La única vía para ello, cree, es que todas las administraciones «vayan de la mano» en la lucha contra el narcotráfico.
La proliferación de fumaderos atrae a toxicómanos de otras localidades, como desveló HOY este fin de semana. Los nuevos puntos de venta de droga han provocado un aumento de personas durmiendo en bancos y esquinas, así como un incremento de los incidentes con vecinos.
«No hay una solución a corto plazo si no existe una voluntad decidida por parte de todas las administraciones, y, ni siquiera existiendo, se pueden prometer cosas que no están en nuestra mano», respondió el alcalde a las preguntas de HOY por la alarma que se extiende entre sus calles.
De esta manera, el alcalde descarta emprender un plan específico desde el Ayuntamiento con el que pueda atajar los crecientes problemas del barrio y que inquietan a vecinos y empresarios.
«Proliferación de puntos de venta de drogas: no es fácil acabar con ello. Y esto lo sabe la Delegación del Gobierno y la Policía Nacional, que son quienes tienen que luchar contra ello. ¿Por qué? Porque depende también de la Fiscalía y de la Judicatura». Gragera puso como ejemplo las dificultades para acceder a una de esas propiedades para realizar registros.
El alcalde aseguró ayer que el Ayuntamiento hace lo que puede, con presencia diaria por parte de la Policía Local en el Casco Antiguo. Y emplaza a los vecinos que tengan incidentes a que llamen al teléfono 112, que se encarga de coordinar los servicios de emergencia, para evitar sentirse desamparados si en ese momento los agentes no pueden acudir.
«La Policía Local está todos los días en el Casco Antiguo. Cualquier vecino, por muchos que algunos digan que no, ve patrullas de la Policía Local y agentes a pie», afirmó. Aunque insistió en que la lucha contra el tráfico de drogas y el control de la seguridad ciudadana depende de la Policía Nacional, y que el cuerpo municipal colabora con este.
Ignacio Gragera insistió en que el Ayuntamiento está llevando actividades a la parte histórica. Pero también ha afirmado: «Si queremos decirle que esto se soluciona chasqueando los dedos, bueno... obviamente es una pelea a medio y largo plazo».
«Estoy empeñado en recuperar el Casco Antiguo en la parte que nos toca de manera directa, pero es una pelea a medio y largo plazo que estoy dispuesto a luchar y a ganar», aseveró.
El alcalde argumentó que su labor será involucrar al resto de administraciones para que sean conscientes de la realidad que se vive en el Casco Antiguo. «Esta es una pelea que nos compete a todos», dijo Ignacio Gragera, que pide deslindar la situación de la zona histórica del debate político.
Incidió en que la Delegación del Gobierno es consciente de las necesidades del barrio y de las peticiones que ha realizado en los últimos tiempos, así como que mantiene un contacto permanente con la Policía Nacional y con la Delegación del Gobierno.
A pesar de los últimos incidentes, Gragera valora que los pacenses puedan subir a la Plaza Alta, algo que no se podía hacer hace décadas. Pero también incide en que es una «situación cíclica» y que hace cuatro años se dio también un momento problemático para la barriada. «Pido a la gente que entienda que las fórmulas mágicas no existen».
Alternativa a la calle
Ignacio Gragera asegura que Servicios Sociales ofrece una alternativa a quienes duermen en la calle, pero que no se puede obligar a internar en un centro a quien no quiere entrar.
Gragera defendió ayer que el Ayuntamiento invierte «bastante más en el Casco Antiguo que en otras zonas de la ciudad», y puso como ejemplo las promociones de la Inmobiliaria Municipal para llevar a nuevos vecinos o la rehabilitación del antiguo convento de San Agustín, así como la renovación de espacios públicos con la extensión del modelo de calles sin bordillos. Con ello, el alcalde defiende que el Ayuntamiento es activo en el Casco Antiguo desde hace tiempo con inversiones para atraer nuevos vecinos y actividad diaria. También puso de ejemplo la cantidad de actos que ha acogido este fin de semana. Entre ellos, los del Día Mundial del Turismo.
Por su parte, desde la Delegación del Gobierno aseguraron trabajar «cada día para velar por la seguridad ciudadana en toda la ciudad de Badajoz, no solo en el Casco Antiguo, sino en cada uno de sus barrios».
El PSOE pide un plan de actuación integral
El portavoz socialista, Ricardo Cabezas, reclama al Ayuntamiento que ponga en marcha un plan de actuación integral en el Casco Antiguo. «Es la única manera de abordar la marginación y debe involucrar al Ayuntamiento, la Junta y la Delegación del Gobierno».
Cabezas ha insistido este lunes: «hay que hacer una intervención social, de vivienda y de seguridad. De nada sirve poner un policía en casa esquina si lo otro no se aborda». En su opinión, el problema va más allá del consumo de drogas para abarcar incluso el absentismo escolar y, de ahí, la necesidad de poner en marcha acciones desde distintos frentes.
El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento ha incidido en que «los focos de marginalidad se acercan cada vez más a las zonas nobles del Casco Antiguo, como la plaza de España o Juan Carlos I, y crea alarmismo. Pero, por desgracia el menudeo, y el consumo se ve desde hace años».
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