Las protestas del campo se extienden y los olivareros de Jaén cortan autovías

El sector agrario ha vivido este jueves su tercer día de protestas, con cortes de carreteras en Jaén y manifestaciones en distintas ciudades de Castilla y León, en una movilización en la que han participado miles de agricultores que piden fundamentalmente rentabilidad para el campo.

Las principales carreteras de Jaén, las autovías A-4, A-44, A-32 y A-316, han permanecdio cortadas por las protestas de los olivareros, que reclaman precios justos para el aceite. Las acciones comenzaron a las 9.00 en Despeñaperros, a la altura de La Carolina, cuando un grupo de personas, al margen de las convocatorias, decidieron quemar ruedas cortando los dos carriles.

Los olivareros han anunciado que tienen previstas movilizaciones permanentes hasta que se establezcan medidas contra los bajos precios del aceite de oliva.

A su juicio, estas cotizaciones se deben a la especulación, las importaciones de aceite de otros países y su uso como producto reclamo en la distribución, además de a circunstancias «ajenas» a ellos, como el Brexit o los aranceles del Gobierno estadounidense.

La jornada ha arrancado marcada por los ecos de la jornada del miércoles, cuando los enfrentamientos en Don Benito entre la Policía y los manifestantes, coincidiendo con la inauguración de la feria internacional Agroexpo, se saldaron con 19 heridos leves.

La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha mostrado hoy la disposición del Ejecutivo a buscar mejoras ante las demandas del sector primario y ha condenado los incidentes de ayer, que ha atribuido a una minoría.

Por su parte, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha vinculado esos incidentes a «pequeños grupos violentos», cuyas acciones contrastan con la actitud «pacífica» de las organizaciones agrarias convocantes.

Desde la oposición, el presidente del PP, Pablo Casado, se ha centrado en la actuación policial para pedir que «ponderen la respuesta», a la vez que ha expresado su apoyo al mundo rural.

En Salamanca, Zamora, Palencia y Burgos han tenido lugar este jueves las protestas, que en total han concentrado más de 7.000 personas y 500 tractores, para alzar la voz «en defensa de su futuro» y denunciar la «grave» situación de falta de rentabilidad y el «hartazgo» ante los ataques que está recibiendo el sector.

La finalidad, según han explicado las organizaciones agrarias, es que las administraciones tomen conciencia de la gravedad del problema y se pongan en marcha «verdaderas» políticas de apoyo a este sector estratégico.

La aprobación del nuevo salario mínimo interprofesional (SMI) se ha sumado a su lista de preocupaciones, porque consideran que el aumento de costes amenaza su rentabilidad, aunque Planas hay afirmado en Níjar (Almería) que «no es el problema» del campo y es «perfectamente asumible» si se quiere la misma «dignidad» para los trabajadores del sector.

Está previsto que las manifestaciones continúen en los próximos días en Castilla y León, Cantabria, Castilla-la Mancha, Comunidad de Madrid y Andalucía.