Monago reclama en Madrid un impuesto de patrimonio nacional

José Antonio Monago insistió ayer en su apuesta porque se implante un impuesto de patrimonio de carácter nacional y con un fin de solidaridad entre regiones. El presidente de la Junta hizo esta propuesta en su primera intervención en un foro en Madrid desde que fue elegido presidente. Como invitado de los desayunos de Europa Press el jefe del Gobierno regional hizo un repaso a algunas de las medidas ya anunciadas en Extremadura, como su intención de hacer un recorte del presupuesto de 2012 superior al 10% y de basar su gestión en la austeridad: «Se acabó la fiesta», afirmó. «Vamos a contratar lo que podamos pagar».

En la cuestión del impuesto de patrimonio, de actualidad por el anuncio del Gobierno de aprobarlo en breve, Monago criticó a Rubalcaba y al PSOE, que en este asunto van «a salto de mata», e insistió en las líneas ya avanzadas en su discurso del Día de Extremadura: aboga por implantar un impuesto que grave a los más pudientes, pero que no sea de ámbito regional sino nacional. Es decir, que lo recaude el Estado y lo distribuya entre las comunidades que más lo necesiten. El presidente extremeño reconoció que en la región hay muy pocos ricos, por lo que si Extremadura se limitase a ingresar lo que corresponde de sus contribuyentes más adinerados sería insignificante. Monago recalcó que no se puede permitir una España de varias velocidades. «El espíritu constitucional es que vayamos todos a la misma velocidad».

Aunque reclamó un esfuerzo mayor a los ricos españoles y les pidió que arrimen el hombro en tiempos de crisis como hacen los millonarios de otros países, rechazó implantar un impuesto a los bancos. En su opinión, esas cargas impositivas terminan por trasladarse a los clientes. Monago reivindicó también una financiación autonómica más justa, pues considera que el sistema actual perjudica a Extremadura, dado que prima la población sobre otras variables.

No se tocan liberados

En su conferencia recordó la reivindicación de Extremadura del Eje 16 de transporte ferroviario como instrumento clave para el desarrollo regional. Reconoció que en el PP hay opiniones diferentes sobre qué Eje ferroviario se debe apoyar (Arenas defiende el Mediterráneo), y apostó porque la decisión en la UE se tome después de las elecciones, y no el 10 de noviembre. «Un gobierno que está prácticamente en funciones no puede decidir». En cuanto a qué postura adoptará Rajoy, Monago cree que en este asunto el presidente del PP tiene «el corazón partido», como Alejandro Sanz. A preguntas de los periodistas, Monago mostró su convicción de que será posible pactar un plan de empleo con los agentes sociales de Extremadura y rechazó reducir liberados sindicales, como hacen otras comunidades.