Trasladan unas 30.000 tencas de La Charca de Casar de Cáceres por su pequeño tamaño

«Ayer no se murió ninguna y hoy tampoco», se escucha a los protagonistas mientras los peces cambian de un punto a otro. Juan José Pacheco, es el presidente de la sociedad. Organiza las cajas y las tenca son introducidas de forma cuidadosa en cada una de ellas.

Son de pequeño tamaño, demasiado pequeño, explica, para que puedan ser pescadas. «Lo que estamos haciendo es cogerlas y llevarlas a la piscifactoría de la cooperativa Virgen del Prado. Está muy cerca de La Charca y allí se van a alimentar y esperamos que crezcan. Tal y como están no creemos conveniente que estén en la charca», relata.

Asegura el presidente que la mayoría no tienen el tamaño necesario para que puedan pescarse por lo que si el tope máximo permitido son 25 ejemplares, «al final tienes que sacar más de 100 para poder pescar las que cumplen las condiciones», insiste. Este año no han crecido lo suficiente debido a la cantidad excesiva que hay. «La Charca tiene una enorme cantidad de tencas y la estamos vaciando. Está repleta», confirma Pacheco.

Francis, un veterano pescador de la barriada del Perú, de Cáceres, acompaña a Juan José en las labores de traslado de los peces. Desde hace años practica este deporte de forma habitual en el lago casareño. Destaca que se pone el máximo cuidado ya que «son muchas» y se quiere evitar que un traslado demasiado largo provoque su muerte por falta de oxígeno. De momento no ha sido así. «Hemos sacado unas siete mil y mañana otras más», añade.

El presidente de la sociedad de pescadores de Casar de Cáceres sugiere que la cifra final puede superar los 30.000. Empezaron el martes y seguirán hasta mañana. Esta tarde tienen previsto repetir la operación.

«Vamos a dejar los ejemplares de mayor tamaño y esperamos a que crezcan los más pequeños antes de comenzar la temporada. Teníamos previsto haberla iniciado el día 5 pero no podrá ser», advierte.

La sociedad de pescadores cuenta con unos 250 socios. Coger el mejor sitio para una jornada de pesca en La Charca no siempre es sencillo. Tampoco lo es entrar a formar parte de este selecto club. «Hacemos hueco si hay algun fallecido o se producen bajas, pero no es lo normal», destaca Juan José Pacheco, que confía en poder comenzar la nueva temporada «a finales de mayo».

No es la primera vez que ocurre algo similar. El año pasado la sociedad de pescadores optó por paralizar la actividad en La Charca durante un mes, hasta el inicio del verano. La decisión se adoptó tras comprobarse que los aficionados sacaban del agua un elevado número de tencas que no alcanzaban los 15 centímetros.

Numerosos socios plantearon que era preferible posponer la temporada y darle un tiempo a los animales para alcanzar el tamaño necesario y poder ser capturados. «En junio hará más calor, que es lo que necesitan las tencas y tendrán la medida. Habrá más alegría en la pesca», argumentó entonces el presidente del colectivo. En 2021 se retrasó también el final de la temporada, una compensación que podría repetirse en 2022 tras el retraso que se va a producir en el inicio.