Vecinos de Oliva de Plasencia muestran su rechazo a la planta de biometano

Vecinos de Oliva de Plasencia han mostrado su rechazo este sábado contra la planta de biometano que Mapfre Renovables levantará junto a esta localidad de poco más de 300 vecinos. Durante la concentración, la plataforma 'Salvemos a Oliva' ha leído un manifiesto en el que aseguran que la planta perjudicará a vecinos y entorno. «Es pan para hoy y veneno para mañana», se podía leer en las pancartas.

Uno de los objetivos que persigue la plataforma es que se instale lejos del núcleo urbano y para ello, reclama una legislación específica que regule las plantas de biogás con respecto a una distancia mínima. «¿Por qué una planta en Oliva y tan cerca del núcleo de población? Según ellos, por la proximidad del gaseoducto, pero no es creíble porque discurre por el municipio más distanciado del núcleo urbano, con zonas de buen acceso y red eléctrica», recoge el manifiesto que se ha leído. También por la producción de aceite de oliva. «El olivar en el municipio es testimonial, por lo que esos argumentos no nos justifican nada», han asegurado. Es más, afirman que conllevará «un problema al pueblo al traer material contaminante como es el alperujo».

«La elección real de Oliva se basa en que es un pueblo escaso de recursos y servicios», sentencian. «Nos intentan vender puestos de trabajo, una licencia de obras, una tributación, un IBI... pero los puestos de trabajo son cinco y la empresa no se compromete a tributar en el municipio durante la fase de explotación de la planta», han explicado.

Además, han recordado que la cercanía con la ciudad romana de Cáparra, situada entre los términos municipales de Guijo de Granadilla y Oliva de Plasencia, y que «por su condición de monumento granítico puede verse deteriorado» al reaccionar con los gases que emitirá la planta.

Según han expresado en el documento, se enteraron de la instalación de la planta en mayo de 2024 a través de la prensa, que recogía un anuncio del DOE para construir y poner en funcionamiento una planta de biometanización de alperujo. Los vecinos mantuvieron con la empresa una reunión en la que, aseguran, «intentaron vendernos una burra a la fuerza, sin dar respuesta a nuestras preguntas, que merecen respuesta».

Tras ello, comenzaron reacciones en contra y recogidas de firmas. «Con las alegaciones conseguimos un nuevo proyecto y un nuevo periodo de alegaciones. Sabemos que no gustaron porque revolvieron más a los vecinos al dejar claro las consecuencias de la planta y por otro lado, porque dejó clara la ignorancia de aquellos que decían que todo estaba explicado en el proyecto y que problemas ninguno», continúa el manifiesto.

Entonces, se constituyó la plataforma, que recuerda que ya se manifestaron en agosto del año pasado en el pueblo y en septiembre en Madrid, donde solicitaron una legislación específica junto a una veintena de pueblos. También han realizado 34 concentraciones semanales.

La empresa promotora de la planta es Desarrollos Bioenergéticos de Extremadura Alagón, una firma que cuenta como socio con un fondo constituido por Mapfre Energías Renovables.

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