La Junta interviene una residencia geriátrica municipal de Alburquerque
Los residentes serán trasladados a otros centros y el Ayuntamiento tiene un plazo de dos meses para acometer la adecuación de las instalaciones que exige la Administración regional
redacción | f.j. negrete
Lunes, 19 de julio 2021, 18:46
La Junta de Extremadura ha intervenido el centro residencial 'Virgen del Carmen' de la localidad pacense de Alburquerque tras comprobar, en una inspección, las «graves deficiencias» de mantenimiento que presenta, con «zonas en estado ruinoso, equipamiento e instalaciones muy deterioradas, así como la escasez de medios para atender adecuadamente a los residentes» o el incumplimiento de la normativa.
Ante esta situación, el Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia (Sepad) ha decidido iniciar un expediente sancionador al Ayuntamiento de Alburquerque, así como suspender nuevos ingresos de personas en el centro y revocar la autorización de funcionamiento y la acreditación de las plazas para personas en situación de dependencia.
Por todo ello, se ordena el cierre cautelar temporal del centro, que dispone de 28 plazas residenciales, de las que dos son para autónomos y 26 para personas en situación de dependencia, informa la Junta en nota de prensa.
Así, el Sepad realizará un traslado provisional de los 18 residentes en plazas financiadas por este organismo a los centros públicos más cercanos e insta al Ayuntamiento al traslado del resto de los residentes.
Además, la Junta requiere al Ayuntamiento de Alburquerque para que en el plazo de dos meses proceda a las reparaciones de instalaciones, dotación de equipamiento adecuado, desinfección y desinsectación integral del edificio.
Finalmente, explica que el Ayuntamiento deberá iniciar la solicitud de autorización y acreditación «una vez comprobado por el equipo de inspección que los requerimientos han sido atendidos en su totalidad», mientras que se le requiere el establecimiento de un plan de formación al personal del centro respecto a la atención personalizada y contenciones mecánicas de residentes.
Está previsto que los usuarios de la residencia empiecen a abandonar las instalaciones a lo largo del día de este martes.
Una de las trabajadoras comentó a HOY que han sido las quejas del personal y de los familiares de los residentes, a quienes las cuidadoras más reivindicativas han convencido de que den el paso, quienes se han decidido a denunciar al Sepad la situación por la que atravesaban desde hace muchos meses en ese centro.
Esta mujer, que prefiere omitir su nombre, asegura que la residencia se ha ido abandonando al abrir otra más nueva, y pese a los continuos requerimientos del personal, no se ha querido solucionar el deterioro físico del centro. «El mantenimiento ha sido cero», añade, y explica que hay goteras en diversas dependencias, algunas en el comedor, de forma que cuando llueve tienen que cambiar de mesa a algunos residentes para que no se mojen. Lo mismo sucede en la misma enfermería, donde también hay varias goteras.
Esta trabajadora cuenta que los miembros del Sepad que realizaron la inspección se llevaron fotos, vídeos que ya existían y otros realizados por ellos mismos.
También muestra su preocupación porque le han dicho que le van a pagar el mes de junio, cuando la adeudan cinco más y no sabe si percibir ese dinero puede perjudicarla en caso de denuncia en el futuro.