Carta a Pablo Iglesias

Con un partido en riesgo de desaparecer, como si de un equipo de fútbol sin recursos se tratara, nuestro flamante ex vicepresidente segundo del gobiermo ... y secretario general de Podemos sale al terreno de juego para tratar de remontar el partido. Sin embargo, su juego es el de un juvenil que debuta, en su caso un político que trata de fingir experiencia de gestión. Ha abandonado a nuestros mayores en residencias y ha provocado un clima de hostilidad y crispación nunca antes conocido. La culpa de su nefasta gestión, como no podía ser de otra manera, no es suya. Sin lugar a dudas, es de la malvada Ayuso, que tiene la indecencia de construir un hospital de pandemias en medio de una pandemia, no como los progresistas de Valencia que construyen uno de campaña en tiendas que vuelan. Ustedes también la llaman agitadora de masas cuando discrepa y defiende los intereses de los madrileños. Cataluña para ustedes es el paraíso, las empresas se marchan, la delicuencia aumenta, la gente no aguanta más y también se va. Pero no, es Madrid que atrae inversiones, negocios y promueve impuestos bajos la que es el mismo infierno. Madrid aunque les duela es ejemplo de libertad, donde gobierne quien gobierne, los derechos no se coartan. El cordón sanitario con el que usted envuelve a Vox es demasiado grande y a ustedes los tiene ya poco a poco enjaulados. Madrid y España no deben contar con extremistas en sus gobiernos sino con gestores públicos que defiendan a sus ciudadanos y que luchen día a día para crear una sociedad más avanzada, libre y justa.