Vandalizan la Casa de Juntas de Guernica y roban la bandera de España
Bildu evita suscribir la declaración de condena por parte del Parlamento vizcaíno, que habla de «atentado» contra un «símbolo de la soberanía popular»
Xabier Garmendia
Sábado, 6 de diciembre 2025, 14:38
La oleada de ataques a instituciones, partidos y dirigentes en País Vasco no parece llegar a su fin. A las pintadas en sedes de formaciones y placas de víctimas, la aparición de pancartas con representantes políticos señalados en una diana y a otro tipo de iniciativas se ha sumado en la madrugada de este sábado la vandalización de todo un símbolo, la Casa de Juntas de Guernica. La sede del Legislativo foral de Vizcaya ha amanecido con pintadas y sin las banderas de España y la Unión Europea en una iniciativa que, al menos por ahora, no ha sido reivindicada.
«Gurea ikurriña» («la nuestra es la ikurriña») es el mensaje que desconocidos han dejado a la entrada del edificio, donde sólo se mantienen las banderas de Vizcaya y País Vasco, con los otros dos mástiles vacíos y sin rastro de las enseñas española y europea. La acción se ha cometido de madrugada en un día especialmente simbólico, ya que este sábado se cumplen 47 años desde la aprobación en referéndum de la Constitución. Una jornada repleta de actos en Madrid a los que los partidos nacionalistas, PNV y EH Bildu, no han acudido.
El ataque ha sido condenado «enérgicamente» por parte de la mayoría de la Mesa de las Juntas Generales; en concreto, por cuatro de los cinco miembros, pertenecientes a PNV, PSE-EE y Elkarrekin Podemos. Sin embargo, EH Bildu ha evitado sumarse a una declaración en la que el órgano rector del Parlamento vizcaíno habla de «atentado contra un espacio que simboliza la soberanía popular de Bizkaia y que alberga el Árbol de Guernica, emblema universal de la libertad, la democracia y la paz del pueblo vasco».
El comunicado añade que este ataque «constituye una vulneración del clima de convivencia pacífica y del compromiso firme de la sociedad vasca con la normalización, la pacificación y el respeto íntegro a los derechos humanos». De igual manera, agrega que «supone una agresión al patrimonio cultural del territorio y de la imagen de un enclave que atrae cada año a miles de visitantes». Por último, reitera que «ninguna acción violenta tiene cabida en una sociedad democrática, plural y comprometida con la libertad».
No sólo ha habido una declaración del Legislativo foral, sino también del Ejecutivo. La Diputación ha condenado «de manera firme y rotunda» el ataque contra un «símbolo histórico y democrático de nuestro territorio». El bipartito PNV-PSE habla de «acto inadmisible» y de una «agresión a la representación legítima de la sociedad de Vizcaya y a los valores de convivencia, respeto y pluralismo». El ente foral, además, «muestra su solidaridad con las Juntas Generales y reafirma su compromiso de defender nuestros espacios democráticos frente a cualquier forma de violencia o intolerancia».
Lo ocurrido esta noche en Guernica se suma a toda una sucesión de ataques esta misma semana. En la madrugada del lunes al martes, miembros de Ernai arrojaron pintura roja y colocaron carteles en la sede del PP en Bilbao y un día después lo reivindicaron en un vídeo. La organización juvenil de Sortu, además, cometió la noche del jueves al viernes otra acción consistente en derribar el último toro de Osborne que quedaba en Euskadi, concretamente en Rivabellosa. Lo justificaron porque «los símbolos españoles no tienen cabida en Euskal Herria».
Esta misma semana también, el miércoles, aparecieron vandalizadas tres de las nueve placas que el Ayuntamiento de Durango colocó en recuerdo a otras tantas víctimas de ETA fallecidas en el pueblo. Y ese mismo día, en el campus de la UPV/EHU en Vitoria, se colgaron una serie de pancartas en las que se señalaba en la diana a dirigentes políticos como el secretario general del PSE-EE, Eneko Andueza, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, así como el escudo de la Ertzaintza.