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Vídeo: Atlas | Foto: Ignacio Pérez

Un familiar del concejal Javier Ardines encargó su asesinato «por celos»

Los supuestos autores materiales son otro español y dos argelinos que han sido arrestados en Bilbao y Suiza

olaya suárez y LUCÍA RAMOS

Bilbao

Martes, 19 de febrero 2019, 08:41

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La noticia de la detención de cuatro hombres en una operación desarrollada en Bizkaia en relación al asesinato del concejal de IU en Llanes (Asturias) Javier Ardines ha generado un enorme revuelo en un concejo que seis meses después de lo ocurrido vuelve a revivir los hechos. Más impactante ha sido para el entorno de la víctima descubrir que uno de los arrestados, a quien los investigadores consideran autor intelectual del crimen, es una persona sumamente cercana al edil de IU. Se trata del marido de una prima de la mujer de Ardines.

Según pudo saber este diario, el hombre reside habitualmente en la localidad vizcaína de Amorebieta, si bien la pareja posee una vivienda ubicada a escasos metros de la del concejal asesinado. Es «una persona celosa», indicaron fuentes próximas al caso, que, al parecer, no llevaba muy bien la buena relación que existía entre su mujer y el edil asesinado. Estas mismas fuentes reconocen que la posibilidad de que uno de los supuestos autores fuera una persona tan próxima a la víctima y su familia se había comentado en varias ocasiones, pero nadie quiso creer que fuera cierto. Si resultó extraño en la zona que la prima de la mujer de Ardines y su marido no hayan vuelto a su vivienda de Belmonte de Pría, ubicada a «apenas cien metros» de la del concejal, desde lo ocurrido en la madrugada del 16 de agosto.

El operativo

Tres personas han sido detenidas este martes por la mañana en un amplio dispositivo de la Guardia Civil realizado en varios puntos de Bizkaia. Y una cuarta persona ha sido arrestada en Suiza por su supuesta participación en los hechos. Los cuatro individuos son dos españoles y dos argelinos. Los agentes consideran que tres de los detenidos son los autores materiales del crimen del edil, mientras que el cuarto arrestado sería el inductor. Este último sería el marido de una prima de la mujer de Ardines. Algunas fuentes lo identifican con el nombre de Pedro L. N.

En el transcurso de la operación la Guardia Civil ha realizado también registros en Otxarkoaga, Amorebieta, Erandio, así como en Altzaga, en Gipuzkoa. Los arrestados, que son vecinos de Bizkaia, han sido detenidos en sus respectivos domicilios, dos en Bilbao y uno en Amorebieta, mientras que el cuarto ha sido arrestado en Suiza. En estos momentos se están realizando las gestiones con las Autoridades suizas para proceder a los trámites de extradición para que comparezca ante la Justicia española por estos hechos.

El edil Javier Ardines, único concejal de IU en Llanes, fue asesinado el pasado 16 de agosto cuando salía de su domicilio en Belmonte de Prías (Llanes). Su cadáver fue hallado a unos 300 metros de la vivienda. Los investigadores manejan como hipótesis más probable el móvil sentimental y que se llevara a cabo por sicarios y por encargo, han revelado fuentes de la investigación. Los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) siguen esta línea tras descartar una motivación política o alguna cuestión relacionada con tráfico de drogas u otros delitos.

El caso

Javier Ardines fue asesinado en un camino de Belmonte, en la parroquia asturiana de Pría, donde vivía. Ocurrió a las seis de la mañana, cuando salió de casa para ir a faenar en su barco, 'Bramaadoria', que estaba atracado en el puerto de Llanes. Había quedado con una amiga, Beatriz, aficionada a la fotografía, a la que nunca llegó a recoger.

Al parecer, el hombre salió en su vehículo y unos metros más allá de su casa se encontró el camino cortado por unas vallas. Salió para quitarlas y debió ser en ese momento cuando fue golpeado y murió. Un vecino declaró haber escuchado gritos a esas horas. Según se supo después, el concejal recibió un fuerte golpe en la cabeza con un objeto contundente, trató de huir, pero tras caminar unos metros se desplomó. Fue entonces cuando su atacante le estranguló.

Lugar donde encotraron el cadáver de Ardines.
Lugar donde encotraron el cadáver de Ardines. JUAN GARCÍA LLACA

El cadáver lo encontró el vecino que oyó los gritos. Estaba a 70 metros de la furgoneta, que tenía las puertas abiertas y el motor encendido. Cuando llegaron los agentes y los sanitarios, solo se pudo certificar su muerte. Precisamente, quien le atendió fue el marido de su amiga Beatriz, que más tarde fue interrogada por la Policía.

Con muchos enemigos

La muerte de Ardines conmocionó la localidad asturiana, de 14.000 habitantes, y también destapó una trama de corruptelas y odios en el consistorio local. De hecho, desde que el fallecido se convirtió en concejal de Pesca, Medio Rural, Playas y Personal en 2014 se granjeó un gran número de enemigos. Su partido, IU, pactó con PP, Foro y Vecinos por Llanes para echar del poder a los socialistas, que llevaban 28 años gobernando. Ardines era también el hombre fuerte del alcalde, Enrique Riestra, que le mostró todo su apoyo cuando fue amenazado por su plan de acabar con los interinos que copaban los puestos de funcionarios en el Ayuntamiento y en la Policía local.

Desde el primer momento, las investigaciones se centraron en dos líneas. Una tenía que ver con la vida sentimental del fallecido. La otra, con su actividad política. Por ello, cuando se destapó que había sido amenazado, fueron interrogados todos los funcionarios locales y sus coartadas se comprobaron con meticulosidad. Incluso hubo pruebas de cotejo de ADN.

Han sido ocho meses de investigación de la Policía Judicial en colaboración con la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que se ha llevado con toda la discreción posible. Hace un mes, la delegada de Gobierno de Asturias, Delia Rosa, ya avanzó que estaba «muy centrada» y el día 1 la titular del Juzgado de Primera Instancia en instrucción de Llanes prorrogó otro mes el secreto de las operaciones.

Las fechas

16 de agosto. A las seis de la mañana Javier Ardines sale de casa camino del puerto. A las ocho, un vecino de la zona que paseaba a su perro encuentra el cadáver. Minutos más tarde se certifica su muerte y el Juzgado de Primera Instancia de Llanes se hace cargo de la investigación.

17 de agosto. La autopsia, cuyo resultado se conoce oficialmente días más tarde, confirma que Ardines recibió varios golpes en la cabeza, uno de ellos en la nuca. También que el concejal se resistió y que terminaron asfixiándole.

18 de agosto. Los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil al frente del caso reconstruyen las últimas horas de la vida de Ardines. Vecinos, familiares y amigos comienzan a ser interrogados y la psicosis empieza a extenderse. Algunos se prestan a que les realicen pruebas de ADN.

25 de agosto. A pesar de que se decreta el secreto del sumario, se tiene la certeza de que no lo hizo una persona sola. La Guardia Civil busca el arma homicida mientras se suceden los actos de condena y los mensajes de apoyo a familiares y amigos.

20 de septiembre. Los resultados de los restos de ADN encontrados en las manos de Ardines ya obran en poder de la Guardia Civil.

28 de septiembre. La investigación se centra ahora en analizar las llamadas telefónicas realizadas en la zona horas antes del asesinato.

1 de octubre. La juez prorroga un mes más el secreto del sumario.

19 de febrero de 2019. La Guardia Civil detiene a cuatro personas. Tres en Bizkaia y una en Suiza. Uno de los arrestados es un familiar del concejal que encargó su crimen «por celos».

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