
Paqui Campos, presidenta de Aeca
Secciones
Servicios
Destacamos
Paqui Campos, presidenta de Aeca
«Hay una visión algo prejuiciosa sobre los vendedores ambulantes». Es una de las claves que aporta Paqui Campos, presidenta de Aeca (Asociación de Empresarios ... del Comercio de Cáceres) al analizar la realidad del gremio, que ella conoce de primera mano. «Sigue habiendo quien los ve como una especie de piratas, en vez de como lo que son, trabajadores autónomos, empresarios que pagan sus impuestos como los demás», contextualiza la responsable del colectivo.
Paqui Campos
Presidenta de Aeca (Asociación de Empresarios del Comercio de Cáceres)
Entre esas tasas que abonan está la de ocupación de la vía pública, que a cambio de una cantidad que varía según el municipio, les procura servicios públicos como el de limpieza o la vigilancia policial, aunque según algunos de ellos, no todos los consistorios cumplen con su parte de modo eficiente.
«Los vendedores ambulantes –analiza Campos– tuvieron un problema grave durante la pandemia, porque fueron dos años sin celebrarse mercadillos, que para muchos es la principal si no la única fuente de ingresos, y todavía están pagando esto que ocurrió entonces».
Esa situación les generó un quebranto económico cuyo eco llega a la actualidad, y que tuvo consecuencias en varios frentes. La difícil situación llevó a algunos vendedores a realizar inversiones, como un modo de reforzarse para afrontar un nuevo escenario tras la crisis de la covid. Y esos pagos pendientes aún lastran sus economías, apunta la presidenta de Aeca y lo refrendan los datos del INE, que detalla que la inversión en activos materiales del comercio al por menor en puestos de venta y en mercadillos en Extremadura alcanzaba los 584.000 euros en 2023, último para el que ofrece datos. Esta cifra es un 47% superior a la de 2018, el último ejercicio no condicionado por la covid.
«La venta ambulante está sufriendo impactos que sufre el comercio en general, como los cambios en los hábitos de consumo o la competencia de Internet», analiza Campos. «También –sigue– el encarecimiento del combustible, que le penaliza especialmente porque los ambulantes viajan de mercado en mercado, y el de las materias primas, además de la fiscalidad que soportan».
En los últimos años, además, estos vendedores han sido parte de polémicas en torno a las ubicaciones de los mercados francos. Ha pasado en Cáceres y en Plasencia. «La gente quiere mercadillo, pero no a la puerta de su casa», apunta Paqui Campos, que conoce bien el conflicto surgido en Cáceres con el traslado del mercadillo.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.