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Alemania. En las ruinas de Kloster Heisterbach.
«Mis viajes son raros. Busco lugares encantados para dormir y enclaves míticos»
MI VIAJE FAVORITO...RUTA DE LOS CUENTOS DE LOS HERMANOS GRIMM, SAJONIA

«Mis viajes son raros. Busco lugares encantados para dormir y enclaves míticos»

ISRAEL J. ESPINO | PERIODISTA E INVESTIGADORA ·

Si hay alguien que conoce bien todos los lugares mágicos, secretos y encantados de la región, es la autora del blog 'Extremadura Secreta', que ya está dando la vuelta al mundo también para investigar todos sus mitos

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Lunes, 19 de agosto 2019, 14:19

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-¿Cuál ha sido su viaje favorito? ¿Cuándo lo hizo?

-Tengo muchos viajes favoritos, aunque por ahora me quedo con el último, que realmente fueron tres en uno: La ruta de los cuentos de los hermanos Grimm, en Sajonia, la ruta de las leyendas del Rin, en Renania y la ruta de los seres mágicos en la Selva Negra.

-¿Volvería allí o es de las que siempre buscan destinos nuevos?

«Hay platos que no repetiría, como el escorpión que me comí en Tailandia, y que tuve varios días en la garganta»

-Por mucho que me haya gustado un viaje, no suelo regresar. ¡Hay tantos lugares por descubrir!.

-¿A quién le recomendaría este viaje?

-A todo el mundo que tenga niños o que, como yo, conserve parte de su niño interior. Este viaje es como vivir dentro de un cuento de hadas: los paisajes, los castillos, los pueblos.

-¿A dónde le gustaría ir si pudiera?

-Ya estoy preparando mi viaje ideal para hacerlo el año que viene: Gran Bretaña encantada. Un recorrido por los enclaves mágicos de Inglaterra y Escocia, durmiendo en castillos y mansiones históricas.

-¿Cuál es el sitio que más le ha impresionado?

-Quizás Edimburgo. Es raro que una ciudad me impresione, y Edimburgo me enamoró desde el primer día. Todo en ella es mágico, tanto su patrimonio material como el inmaterial.

-¿Cuántos viajes suele hacer al año?

-Normalmente cuatro: una escapada por Europa en enero, un viaje internacional en junio, y un par de escapadas nacionales en primavera y otoño. Nunca viajo en verano, en semana santa o en puentes.

-¿Cuál es el lugar más raro que ha visitado?

-Mis viajes son 'raros' por naturaleza. Busco lugares 'encantados' para dormir, y viajo siempre en busca de leyendas y enclaves míticos, aunque también me tira bastante el necroturismo. Pasé mi luna de miel en Transilvania, y desde entonces mi trayectoria ha sido imparable: Desde las catacumbas de París a las tumbas vudú de Nueva Orleans, pasando por el cementerio judío de Praga, las lápidas victorianas del cementerio de Highgate en Londres, las makabir africanas o los mausoleos fantasmales de Greyfriar.

- ¿Qué tipo de viajera es? ¿De las que planifica o de las que va a la aventura?

-Planifico mucho. Muchísimo. De hecho, mis viajes comienzan meses antes de la salida, cuando empiezo a organizarlos: buscar los lugares con leyendas, localizar los medios de transporte, seleccionar dónde dormir y con quién hablar. Y cuando vuelvo de uno de ellos, descanso un par de semanas y me pongo a planificar el siguiente.

-¿Y suele mirar comentarios sobre hoteles, restaurantes o destinos antes de reservar?

-Sí, siempre. Sobre todo, los de los hoteles. Y además les hago bastante caso.

- ¿Qué tipo de viaje prefiere: los activos o los de relax?

- Siempre activos, aunque últimamente no me meto tanta tralla como antes y suelo dejarme algunas horas libres para disfrutar de los alojamientos.

-¿Mar, montaña o ciudad?

-Mar nunca, no soporto la playa. Y tampoco me entusiasman las ciudades. Soy más de visitar pueblecitos perdidos o rincones especiales.

-¿Low cost o lujo?

-En mis viajes combino ambos. Viajo siempre en vuelos low cost, y busco mucho las ofertas, y el dinero que me ahorro lo invierto durmiendo en hoteles con historia: castillos, palacios, monasterios. Para mí forman parte de la experiencia del viaje.

-¿Qué lugar visitó y quiso quedarse a vivir en él?

-El castillo de Schomburg, en Oberwesel, en Renania. Es el más maravilloso del mundo, roza la perfección. Mi habitación era una auténtica maravilla del romanticismo alemán repleta de libros antiguos, con vistas al Rin y una bañera de mármol del tamaño de una piscina. Los jardines del castillo ocupaban toda la montaña y estaban repletos de rincones escondidos y maravillosos como grutas con seres mágicos, lujosas cabañas en los árboles y cenadores de ensueño. Si algún día desaparezco, buscadme allí. En España me he enamorado del Pazo de Brandeso, en Arzúa, un lugar mágico donde escribieron Valle Inclán y Rosalía de Castro, una maravilla con pasadizos secretos y una biblioteca de ensueño que hacen que cueste mucho volver a hacer la maleta para abandonarlo.

-¿Qué viaje le ha defraudado y no recomendaría nunca?

- Me defraudó muchísimo Bangkok. Me pareció una ciudad desagradable, fea y en continua construcción. Complicada para moverse, difícil para vivir, y un ataque continuo a los pulmones y a la pituitaria.

-¿Es la gastronomía una parte importante de su viaje?

-Sin duda. Soy una gran zampona. Me encanta comer y disfruto muchísimo descubriendo sabores nuevos. Considero imprescindible descubrir la comida local de los lugares que, además, casi siempre está deliciosa.

- ¿Qué plato recuerda de su viaje favorito?

-Una crème brûllée con haba tonka que probé en el castillo de Spangenberg. Todavía salivo cuando la recuerdo.

-¿Es de las que se atreve a probar de todo?

-Todo. He comido caimán en Luisiana, gusanos en Méjico, babosas marinas en República Dominicana, grillos fritos y cucarachas en Bangkok, caracola en Cozumel, zumo de césped en Nueva York, reno en Finlandia. Aunque reconozco que, con algunos, no repetiría, como el escorpión que me comí en Tailandia y que tuve varios días en la garganta.

- ¿Le gusta hacer fotos de sus viajes? ¿Es de las que les gusta compartirlos en las redes sociales?

-Hacemos muchas fotos. Mi pareja siempre lleva la cámara encima, porque siempre aprovechamos los viajes para realizar algún reportaje, pero me da bastante reparo compartir, aunque cada vez lo tengo que hacer más por motivos profesionales.

-¿Qué es lo que no falta nunca en su maleta?

-Un par de libros relacionados con el lugar de destino.

-Y en la vuelta ¿es de las que siempre necesita más espacio por las cosas que ha comprado? ¿Suele traer souvenirs de recuerdo?

-Antes sí, pero ahora cada vez compro menos porque hoy en día, con la globalización, es difícil encontrar algo realmente original, y casi todo puedes comprarlo ya en cualquier sitio.

-¿Qué es lo que llevará seguro en su próximo viaje?

-A mi pareja, sin duda.

PERFIL

  • Periodista y antropóloga. Ha escrito varios libros relacionados con la recogida de leyendas y la historias populares de Extremadura. Autora del blog 'Extremadura Secreta' en el diario HOY.

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