Siete extremeños vacunados con la pauta completa han fallecido por covid

Todas ellas eran personas mayores de 80 años que recibieron los dos pinchazos antes de ser diagnosticados de covid. Por ese motivo, la Junta se refiere a estos hechos como «fallos vacunales con resultado de éxitus».

En ese grupo, el de los mayores de 80 años, todos están vacunados. Fueron precisamente uno de los colectivos, junto a los sanitarios y el personal y usuarios de residencias, a los que primero empezaron a inmunizar porque uno de los factores de riesgo del coronavirus es la edad avanzada.

En Extremadura, el 100% de los mayores de 60 años tiene al menos una dosis y el 70% las dos. Ese hecho ha provocado que la incidencia de casos en mayores de 65 años se desplome por primera vez desde el inicio de la pandemia de veinte casos por 100.000 habitantes a catorce días. Una muestra más de que el coronavirus está en retroceso, especialmente en la población más vulnerable.

Además, el porcentaje de fallecimientos de personas vacunadas es ínfimo con respecto al total de inmunizados en Extremadura y pone de manifiesto que las vacunas están funcionando, tanto para evitar casos graves de la enfermedad e ingresos como las muertes.

En concreto, esos siete fallecimientos solo representan el 0,0027% del total de inmunizados, que en la región ya supera la cifra de 258.000 personas. Son casi el 30% de personas vacunables, es decir, los mayores de 16 años, que suman un total de 911.213 extremeños.

Esos fallos vacunales es normal que se produzcan. De hecho, también pasa con otras enfermedades como la gripe y ya se está comprobando que en mayor porcentaje. Por ejemplo, en la temporada de 2018-2019, de los 33 fallecidos por gripe en Extremadura se habían vacunado 13 (39,4%), según el último informe elaborado por Epidemiología. En la de 2019-2020, de los catorce fallecidos se habían vacunado dos (14,3%), pero «este dato es menos fiable porque no hay informe final de temporada al empezar en marzo la pandemia», explica la Junta.

Eso demuestra que las fórmulas elaboradas contra el coronavirus funcionan y son muy eficaces, un concepto, el de eficacia, que significa que la probabilidad de desarrollar covid en las personas vacunadas disminuye en comparación con las no vacunadas.

Y la cantidad que disminuye es ese porcentaje al que han aludido en varias ocasiones las compañías farmacéuticas, ya que para evaluar la eficacia de una vacuna se necesitan dos grupos: uno control con voluntarios que reciben un placebo (sustancia sin uso terapéutico que se administra de la misma forma que la vacuna) y uno en el que reciben la vacuna. Nada tiene que ver con que una marca proteja más que otra o aporte mayor inmunidad.

En términos generales, en el caso de Pfizer se logra el 95% de eficacia, en Moderna el 94% y en AstraZeneca y Janssen en torno al 70%. En Extremadura se han administrado vacunas de estas cuatro compañías. En todas se necesitan dos dosis para alcanzar la máxima inmunidad, menos en la de Janssen, donde solo es necesario un pinchazo.

La que más se ha utilizado es la de Pfizer, pues es de la que más dosis han llegado a esta comunidad autónoma. En total, esa compañía ha entregado 509.615, frente a las 132.400 de AstraZeneca, 73.600 de Moderna y 21.000 de Janssen.