La policía revisa las cámaras de seguridad para intentar aclarar la muerte de Luis Ventura en Las Vaguadas
El agresor pasará este jueves a disposición judicial, mientras que el detenido por amenazas se encuentra en libertad con cargos y también tendrá que comparecer ante el juez
J. M. M.
Jueves, 31 de agosto 2023, 07:15
Determinar cómo se produjo el fallecimiento de Luis Ventura es la tarea que tienen por delante los investigadores de la Policía Nacional.
Uno de ... los primeros pasos, tras tomar declaración a los detenidos y a los testigos del suceso, ha sido solicitar las grabaciones de las cámaras de seguridad que hay en la zona. En el entorno del centro comercial de Las Vaguadas, donde se produjo la pelea en la que Ventura perdió la vida, hay varios negocios a los que los agentes se han dirigido para poder revisar las imágenes obtenidas.
Uno de esos establecimientos que cuentan con cámaras es el bar donde la cuadrilla de jardineros estaba tomando unas cervezas antes de la trifulca.
La policía espera que las grabaciones les ayuden a aclarar el crimen, pero también están pendientes de la autopsia para conocer la causa exacta del fallecimiento de Ventura, que tenía problemas cardiacos de los que había sido tratado.
El agresor ha pasado una segunda noche en las dependencias policiales
Algunos testigos presenciales aseguran que el detenido, Pedro Toribio, propinó varios golpes al fallecido con un palo en la cabeza cuando éste ya se encontraba en el suelo tras caer después de un primer impacto.
La autopsia también debe servir para detallar este punto, ya que puede variar la catalogación del delito. Si la muerte de Ventura es considerada homicidio imprudente, el agresor se enfrentaría a una pena máxima de cuatro años de prisión. Sin embargo, según las fuentes consultadas, si la autopsia revela que el fallecimiento se produjo por uno de los golpes efectuados con el cuerpo ya en el suelo puede llegar a ser juzgado como asesinato: la pena se elevaría a entre 15 y 20 años de cárcel.
Las mismas fuentes del ámbito del derecho abren la puerta a una opción intermedia, que es que se entienda que el uso de un palo de grandes dimensiones para agredir a una persona con resultado de muerte puede ser considerado homicidio, sin la definición de imprudente, cuya pena sería de entre 10 y 15 años.
Los investigadores esperan que la autopsia sirva para poner luz sobre la causa exacta de la muerte
Ante este abanico de posibilidades ganan importancia las grabaciones de las cámaras de seguridad, que pueden arrojar luz sobre el suceso.
En cualquiera de los casos, también se deben tener en cuenta las horas previas a la pelea. La abundante ingesta de alcohol por las tres personas que participaron en la pelea actuaría como atenuante sea cual sea la catalogación del delito. Así, la pena aplicada sería la menor de la horquilla.
Incluso, se puede llegar a determinar como atenuante muy cualificado si el estado de embriaguez es muy elevado. Eso rebajaría la pena final entre cinco y diez años.
Ante el juez
El siguiente paso del proceso será que Toribio –que lleva en dependencias policiales desde el suceso– pase a lo largo de la jornada del jueves a disposición judicial.
Sí está en libertad con cargos David, el tercero de los implicados en la pelea, que está acusado de amenazas y que también tendrá que comparecer ante el juez.
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