El nuevo tren rápido extremeño, a la espera del permiso de Seguridad Ferroviaria

Como publicó HOY el pasado lunes, Renfe no vende billetes de tren en Extremadura a partir del 15 de junio porque espera que en torno a esa fecha entrará en funcionamiento el nuevo servicio. Por las nuevas vías del tren circularán convoyes del modelo de tren S-730 bajo la marca comercial Alvia. En un primer momento circularán con motores diésel, dado que la línea no está aún electrificada. Pero estas máquinas son híbridas (también tienen un motor eléctrico) porque se espera que en un futuro reciente entre en servicio la catenaria entre Badajoz y Plasencia. Circularán además por una doble vía, lo que evitará atascos como el producido ayer, cuando un mercancías averiado entre Badajoz y Mérida bloqueó toda la línea.

En todo caso, hay que tener en cuenta que desde Plasencia hasta Madrid el tren seguirá circulando durante muchos años por la antigua vía, única, sin electrificar y con evidentes limitaciones. Hasta que este último tramo esté listo, no se podrá hablar propiamente de un AVE.

Por el momento, Adif ha acabado la parte que le toca para poder poner en marcha la primera parte del proyecto, el tren rápido entre Badajoz y Plasencia. Según informa a HOY, «ya se ha desarrollado la planificación establecida y anunciada», es decir las obras e inspecciones que estaban contempladas. «Actualmente se está a la espera de que la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria emita la autorización de puesta en servicio de la línea», se añade.

De manera paralela, Renfe se encuentra en proceso de formación de los maquinistas. La operadora no ha informado a HOY sobre si ya ha finalizado este trámite.

El pasado 21 de marzo, Adif comenzó las pruebas de fiabilidad entre Plasencia y la bifurcación de Peñas Blancas, cerca de Mérida. Estos test de fiabilidad se acometen una vez que se considera que la infraestructura está en condiciones similares a las de explotación y sus recorridos se encajan en el esquema de futuros horarios de trenes comerciales.

En estas pruebas se alcanzan distintas velocidades que permiten comprobar la fiabilidad de las instalaciones. A su vez sirven para ajustar y comprobar los tiempos de recorrido.

Para estas pruebas se utilizaron dos trenes Alvia de la serie S-730, lo que ha permitido que, junto a las pruebas de fiabilidad de esta nueva infraestructura, se lleven a cabo las pruebas para la homologación de material en este trazado, con el fin de obtener el certificado en ruta que permitirá a los trenes circular por la nueva vía.

Para su explotación comercial, los Alvia que se usarán en Extremadura son los que operaban hasta hace pocos meses en Galicia. Antes de viajar a la región pasaron por los talleres de Talgo en Las Matas (Madrid), para ser modernizados.

Renfe ha invertido más de 11 millones de euros en la renovación de los 14 trenes que vienen a Extremadura. Las mejoras en el interior del tren incluyen el cambio de la moqueta actual del piso por flotex, y de la tapicería de las butacas por piel (similar a los S-106); la colocación de 'cartelas' en los portaequipajes; la mejora estética de los aseos; y el reemplazo de teleindicadores exteriores e interiores, y de la iluminación actual por LED en coche cafetería, vestíbulos, luces de lectura y salas de viajeros. También ha habido mejoras en la pintura exterior de los trenes.