Una granja de gallinas, nuevo proyecto de interés regional
Una granja avícola con 420.000 gallinas camperas en Jaraicejo se beneficiará de tramitación preferente
La Junta de Extremadura aprueba el quinto Proyecto Empresarial de Interés Autonómico (Premia), una calificación que permite optar a una tramitación preferente y a ayudas ... al empleo. Se trata de la iniciativa presentada por la empresa Dehesa de Monfragüe para la instalación de una granja avícola de gallinas camperas en la localidad cacereña de Jaraicejo.
Este proyecto se suma a la gigafactoría de Navalmoral de la Mata, la fábrica de diamantes sintéticos de Trujillo, la planta de cartón ondulado de Navalmoral de la Mata y el parque acuático de Casar de Cáceres como actuaciones empresariales que recibirán un impulso especial por parte de la Administración regional.
Los Premia fueron creados en 2020 para impulsar actuaciones empresariales en el marco de recuperación tras la pandemia de covid con la condición de que cuenten con un impacto significativo en el empleo y en el tejido productivo.
En este caso, el proyecto consiste en la creación de una nueva empresa con un volumen de inversión previsto superior a los 14 millones de euros y una creación de empleo de 27 unidades de trabajo agrario durante el primer año de actividad, según ha explicado el portavoz de la Junta de Extremadura, Juan Antonio González.
Asimismo, ha precisado que la previsión de la empresa es contar con 420.000 gallinas en tres núcleos de puesta para la producción de huevos camperos. La compañía ya ha iniciado los trámites para obtener la autorización ambiental unificada para una planta con 35.000 animales, para lo que propone construir una nave de 1.890 metros cuadrados en una parcela segregada de 168 hectáreas de una finca propiedad del Ayuntamiento de Jaraicejo. El proyecto aprobado hoy es mucho más ambicioso.
Como recuerda el Gobierno regional, la calificación de Proyecto Empresarial de Interés Autonómico concede un carácter prioritario y urgente para toda la tramitación autonómica, reduciéndose a la mitad los plazos ordinarios establecidos, salvo los relativos a la presentación de solicitudes y recursos.
Asimismo, se puede sustituir la licencia urbanística o, en su caso, la licencia de obras y usos provisionales por el trámite de consulta en los términos previstos en la normativa autonómica.
La calificación también supone la declaración de utilidad pública o interés social, necesaria en casos de expropiaciones, y la posibilidad de recibir por concesión directa subvenciones a efectos de empleo, entre otras cuestiones.
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