La jueza no autoriza aún la repatriación de Imane, la mujer asesinada en Valencia de Alcántara

Mendoza ha explicado que esta última tendrá lugar una vez que la familia de la fallecida se identifique «como tal», y «tan pronto» lo autorice la autoridad judicial. El delegado del Gobierno recuerda que para disponer del cuerpo de una persona que ha sufrido un homicidio debe mediar autorización del juez que instruye las diligencias, dado que el cadáver constituye una «prueba» del procedimiento judicial.

«Una vez lo autorice evidentemente se procederá a la repatriación, pero, según mis noticias, todavía no está autorizado», ha remarcado, junto con que «efectivamente el órgano judicial considera que todavía hay que mantener el cuerpo a disposición judicial para la instrucción del procedimiento», a la par que ha agregado que en ese momento no tiene la información «actualizada».

Asimismo, preguntado sobre quién correrá con los gastos de la repatriación al país magrebí, Mendoza ha hecho hincapié en que, en el plano teórico, «normalmente» de la repatriación se hace cargo la familia; para añadir que cuando los allegados no disponen de fondos «normalmente» se hace cargo el Ministerio de Asuntos Exteriores del país de pertenencia de la familia. De igual forma, también asegura que, en otros casos, se llega a algún acuerdo que permita en cualquier caso la repatriación del cadáver: «Pero todavía no ha llegado ese momento», ha incidido.

Como informó HOY, la comunidad musulmana en Extremadura está realizando ya una colecta para poder repatriar el cuerpo de Imane. En esta colecta se pretende recaudar los 2.500 euros que, según miembro de esta comunidad, cuesta llevar a cabo este traslado para dar sepultura a esta mujer en su tierra.

El acusado del crimen, Badr Saadaoui, está en la cárcel desde el jueves, después de que la jueza de Valencia de Alcántara decretara para él prisión provisional comunicada y sin fianza por un presunto homicidio. La titular del juzgado Primera Instancia e Instrucción decretó estas medidas tras tomar declaración al hombre de 41 años durante dos horas. La prisión de Cáceres, en la que ha sido internado, le ha aplicado el protocolo antisuicidio.