Suceso Extremadura
Condenan a 14 años de cárcel a un abuelastro por abusar de su nietaLa menor tenía ocho años y la condena a su abuelastro incluye una indemnización de 20.000 euros y no comunicarse con la víctima durante 17 años
Los hechos ocurrieron entre 2011, cuando la niña tenía 8 años, y 2017, y solo cuando la víctima superó la mayoría de edad y tenía ... 20 años se decidió a denunciar los abusos sexuales a los que fue sometida de manera continuada por la pareja de su abuela. La madre de la víctima, que también había sufrido hechos semejantes por parte del procesado, la apoyó en todo momento.
El acusado se declaró inocente negando los hechos, pero al final, tras el juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Badajoz, el hombre ha sido condenado a 14 años de cárcel «como criminalmente responsable de un delito continuado de agresión sexual a menor de dieciséis años», reza el fallo.
Además, le impone la prohibición de aproximarse a la persona a menos de 500 metros o contactar con ella durante 17 años. Asimismo le imponen ocho años de libertad vigilada cuando salga de la cárcel. Por último, en concepto de responsabilidad civil deberá indemnizar a la víctima con 20.000 euros. Hay que tener en cuenta que la Fiscalía y la acusación particular habían pedido en el juicio 15 años de prisión y una indemnización de 30.000 euros por los daños morales y físicos causados.
Regalos y amenazas
Como informó este diario, el ahora condenado, que tiene 65 años, se sentó el martes pasado en el banquillo de los acusados para responder de la denuncia por abusos sexuales continuados que presentó contra él la nieta de su pareja, una chica residente en la provincia de Badajoz que después de superar la mayoría de edad puso en conocimiento de la Justicia los supuestos abusos sexuales que había sufrido desde que tenía ocho años.
Según se recogió en los escritos de acusación presentados por la Fiscalía y la acusación particular, que fue llevada por la abogada pacense Alicia Correa, el procesado aprovechó su cercanía con la niña –era nieta de la pareja del acusado– para «de modo recurrente y sistemático» realizarle tocamientos aprovechando los momentos en los que se encontraban solos.
Creen las acusaciones que para consumar estos hechos cautivó la voluntad de la niña realizándole regalos, en algunas ocasiones, o amenazándola con que tomaría represalias contra ella si no accedía a sus deseos.
Esos hechos habrían tenido lugar a partir del año 2011, cuando la niña solo tenía 8 años de edad, y se habrían prolongado hasta el año 2017. En un primer momento habrían consistido en tocamientos pero más adelante también en penetraciones.
La abogada que lleva la acusación particular explicó que cuando la madre de la víctima tuvo conocimiento de lo sucedido ofreció todo el apoyo a su hija porque también ella, cuando era niña, sufrió abusos sexuales por parte de la misma persona.
El acusado negó ante el tribunal las acusaciones que pesaban contra y el abogado defensor, Fernando Cumbres, pidió la absolución argumentando que los informes realizados por los especialistas no eran suficientemente concluyentes.
La denuncia fue presentada por la joven en el año 2022, cuando tenía 20 años. En ese momento ya había protagonizado varios intentos de autolisis (se había causado lesiones a sí misma) y «presentaba un cuadro de recuerdos angustioso y estresante» a causa de las agresiones sexuales, según recoge el escrito de acusación.
La sentencia no es firme porque es recurrible ante el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx).
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