El SES aplicará en 2023 la prescripción personalizada de medicamentos

El Servicio Extremeño de Salud (SES) ha puesto en marcha un concurso dotado con cerca de 4 millones de euros para el diseño y desarrollo de un sistema de prescripción personalizada dentro del proyecto MedeA. Por el momento solo se ha publicado un anuncio previo, pero la previsión es que salga a licitación en las próximas semanas para que comience con los modelos y pruebas en 2022 y sea una realidad práctica en 2023.

El programa MedeA pretende implantar en Extremadura la llamada medicina personalizada de precisión, que se entiende como la identificación y aplicación individual del abordaje preventivo, diagnóstico y terapéutico más efectivo para cada paciente. Entre sus herramientas principales está la farmacogenética, que utiliza la información genética del paciente para adaptar la prescripción de medicamentos a su caso particular con el fin de disminuir las diferencias que se producen en la respuesta a los fármacos.

El objetivo es contar con herramientas de apoyo en la toma de decisiones que integren y analicen la información de cada paciente con el fin de optimizar la selección adecuada del fármaco y su pauta de uso. Según recoge la documentación del concurso, hasta la fecha no se ha desarrollado en nuestro país una estrategia dirigida a organizar un servicio transversal que permita la integración de información relevante del paciente para la implementación regular de la prescripción farmacológica personalizada en los sistemas sanitarios, objetivo principal del programa MedeA.

El paso decisivo se ha dado con la convocatoria del citado concurso, que se divide en cuatro lotes. Como explica Adrián Llerena, director científico de MedeA y catedrático de la Facultad de Medicina de la Universidad de Extremadura, el más importante será el dedicado a contar con un sistema electrónico de apoyo a la decisión de prescripción. Basado en el uso de algoritmos e inteligencia artificial, permitirá combinar la información clínica del paciente con la genética para ofrecer al profesional sanitario claves sobre qué medicación proponer. Además, este programa se integrará en la historia clínica electrónica, con lo que estará disponible para cualquier consulta a través del programa Jara, el sistema informático integrado del SES. De esa forma, toda la información estará disponible a golpe de ratón.

El segundo lote pretende recabar la información necesaria para esa prescripción personalizada. Consistirá en realizar el genotipado de los pacientes que acudan a las consultas. En principio, se quiere llegar a población de riesgo, como casos graves de tumores, enfermedades cardiovasculares o patologías psiquiátricas. Pero, como apunta Llerena, el objetivo final será llegar a toda la región para que la información genética esté disponible del mismo modo que se puede conocer el grupo sanguíneo de cualquier usuario del SES.

El tercer apartado se dedicará a un sistema informático que, combinado con lo anterior, permita seleccionar a los pacientes adecuados para investigaciones con fármacos y evitar reacciones adversas. Miembro de la Agencia Europea del Medicamento, Adrián Llerena apunta que de esta forma se quiere conocer cuáles son los biomarcadores clave antes del lanzamiento de un nuevo producto, con lo que «ponemos a Extremadura en cabeza en ensayos clínicos».

Por último, habrá un lote destinado a recabar información sobre reacciones negativas a medicamentos que haya tenido el paciente para que se incorpore a los datos disponibles para facilitar la prescripción.

Adrián Llerena destaca el carácter innovador del programa MedeA, que cuenta con la implicación de 97 facultativos de 36 centros de la región. Serán los primeros que cuenten con la información genética de sus pacientes, una labor que ya se viene realizando a lo largo de este año y que ha superado todos los requisitos éticos.

El programa MedeA cuenta con financiación europea gracias al acceso a fondos destinados a la innovación industrial. El director científico del proyecto recalca que este tipo de actuaciones suelen partir del ámbito universitario o de centros de investigación, pero en este caso surge de un sistema sanitario público.

Para ello, se puso en marcha un proceso de coinnovación, que consiste en la participación con la empresa privada para diseñar productos que no existen en el mercado, en este caso los programas de prescripción personalizada con acceso a datos genéticos. De esa forma, se pretende que las compañías participantes cuenten con una herramienta que puedan comercializar, para lo que deberán llegar a acuerdos con el SES.

Este concurso ha pasado por un proceso previo de consultas a empresas para evaluar si los productos que se quieren lograr son posibles en la actualidad. Ese paso fue todo un éxito, ya que concurrieron 86 compañías de 16 países, situando a Extremadura como protagonista de un proyecto pionero. La comunidad se mostró como un lugar idóneo para este proyecto gracias a que cuenta con poca población, a que hay escasa diversidad genética y a que dispone de un sistema sanitario público que atiende a prácticamente todos los ciudadanos.

Ahora los objetivos de MedeA se harán realidad con una licitación pública que permitirá disponer a corto plazo de una herramienta más que ayudará a una correcta prescripción de fármacos a los pacientes del sistema sanitario regional.