El Villanovense se da una alegría sobre la bocina

Los serones se llevaron un merecido triunfo frente al equipo andaluz que llegaba mermado por algunas bajas y que pronto se cargó de tarjetas amarillas con algunas acciones bastante duras. Para el Villanovense fueron las primeras ocasiones del partido y, en el 16, Guille Perero trataba de sorprender con un centro envenenado que se marchó fuera. Acto seguido, Samu Hurtado empaló un balón desde lejos que se marchó fuera, al igual que el siguiente intento de Ohemeng.

El Estepona, que seguía imponiendo su agresividad en defensa, tuvo la primera en el 29, pero estuvo atento Javi Pérez para enviar a córner. A balón parado también tuvieron ambos equipos ocasiones para abrir el marcador en un duelo entretenido que pudo decantar Higor con una ocasión justo antes del descanso.

Pero en la segunda mitad se torció el gesto de los serones después de ver cómo, en el 49, Narbona aprovechaba un centro desde la derecha para batir a Álex Lázaro y poner el partido cuesta arriba (0-1). Encajado ese primer golpe, los serones insistieron con las constantes internadas por banda de Ohemeng y Guillero Perero. Aunque la recompensa iba a llegar desde los 11 metros tras la mano dentro del área de Lucas Pérez que, además, veía la segunda amarilla y dejaba al Estepona con diez. Sillero no dudó y agarró el balón para el lanzamiento ante un Razak al que batió con temple para poner el 1-1.

Con media hora por delante, Manolo Cano quemó las naves dando entrada en el 69 a Runy para acompañar arriba a Higor y Sillero. El '9' serón la tuvo nada más entrar rematando al palo un centro de Ohemeng. La respuesta visitante fue una clara ocasión de Caballero a centro de Kike Pina que no encontró portería por poco. Los serones seguían insistiendo con centros laterales buscando un gol que se resistió hasta el descuento, la grada contuvo durante segundos la respiración tras el balón colgado al área por Ohemeng que, tras tocar en Sillero, terminó rematando a gol Dan Ojog para el delirio serón que, esta vez, le tocó el lado bueno de la moneda.