La Fundación Lumbini inicia los trámites para erigir en el monte Arropé de Cáceres un buda de 47 metros

La Junta de Extremadura ha confirmado que el pasado 8 de noviembre el Ayuntamiento de Cáceres le remitió un nuevo proyecto que tiene «como objeto único la ubicación de una estatua del Gran Buddha en la cota más alta de la parcela y con orientación norte, según lo guiado por la religión budista». La Consejería de Transición Ecológica y Sostenibilidad señala que actualmente se está procediendo al «análisis de la solicitud para iniciar la tramitación ambiental correspondiente». También aclara que el nuevo proyecto presentado «no incluye la instalación provisional del pabellón de Nepal que anteriormente se había solicitado».

Hay que recordar que la Fundación Lumbini había registrado a mediados de este año un proyecto para levantar en el monte Arropé (o Arropez ) un centro budista provisional que respetase las limitaciones impuestas por la ZEPA. Concretamente, la idea consistía en instalar allí una parte del pabellón que llevó Nepal a la Exposición Universal de Milán 2015. Los promotores consideraban que, al tratarse de una estructura desmontable de carácter no permanente, en principio no estaría sujeta a las restricciones que existen para construir en esa zona protegida. La Junta de Extremadura solicitó documentación adicional que nunca llegó a recibir.

El director de relaciones institucionales y estudios budistas de la Fundación Lumbini, Ricardo Guerrero, explicó este lunes el cambio de planes argumentando que los tiempos administrativos para sacar adelante el centro budista provisional se han alargado tanto que han visto más conveniente recuperar el proyecto inicial, empezando por la estatua gigante de Buda. Consideran que la ZEPA no es un obstáculo porque se trata de un mero elemento ornamental sin edificabilidad, y por lo tanto sin implicaciones urbanísticas. El resto del complejo budista, con los templos y las demás instalaciones, se desarrollaría una vez que se relaje la protección medioambiental, dentro del proceso de modificación de las ZEPAs que ha puesto en marcha la Junta.

La estatua que está previsto erigir en Arropé, según los detalles que ofrece Ricardo Guerrero, es un buda sentado de 47 metros (una altura similar al Arco del Triunfo de París o la Torre de Pisa), sin contar la base. Irá recubierta de roca de piroxeno, también conocida como jade blanco, donada por la Asociación Nacional del Jade de Myanmar (antigua Birmania). El coste total de construir la estatua no se he hecho público por el momento, si bien Guerrero indica que será sufragado en su mayor parte por Niraj Shrestha, un empresario nepalí que además es el patrono principal de la Fundación Lumbini. El tiempo estimado que durarían los trabajos es de algo más de dos años.

La Junta de Extremadura tendrá que pronunciarse ahora sobre la viabilidad ambiental del nuevo proyecto presentado, si bien es al Ayuntamiento de Cáceres al que le corresponde conceder la licencia. Desde la Fundación aseguran que la documentación registrada para la estatua gigante de buda se ajusta al plan director que regula esos terrenos.