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Imagen de una visitante contemplando una de las manos que alberga la cueva de Maltravieso. HOY

La cueva de Maltravieso, en Cáceres, gana prestigio como referencia en el estudio del neandertal

Las nuevas dataciones confirman la importancia de la cavidad como lugar que alberga las pinturas rupestres más antiguas del mundo

Cristina Núñez

Cáceres

Lunes, 30 de diciembre 2024, 08:15

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No hay nada en el exterior de la explanada de la cueva de Maltravieso que dé cuenta del tesoro arqueológico que se esconde en esa cavidad que descubrieron fortuitamente en 1951 los hijos del cantero Telesforo Pérez, 'El Francés', y cuyo conocimiento promovió Carlos Callejo, que en ese momento era director del Museo de Cáceres.

Maltravieso, al final de la avenida de Cervantes, pasa desapercibida para el gran público, pero allí se conservan los primeros símbolos que fueron capaces de ser representados sobre las paredes de una cueva por los seres humanos (neandertales) y que ayudaron a configurar las capacidades simbólicas del ser humano en su proceso evolutivo.

En febrero de 2018 la revista Science se hizo eco de nuevos estudios de datación llevados a cabo por un grupo de investigación europeo que concluyeron que una de las pinturas que se hallan en las paredes de esta oquedad tiene una antigüedad de al menos 66.700 años, más del triple de lo que se estimaba hasta el momento, ya que la edad de las célebres manos en positivo y negativo se fijaba en 20.000 años. La noticia, que tuvo una enorme repercusión genero también controversia científica. Seis años después un nuevo estudio internacional con la técnica U-Th (Uranio-Torio) ratifica la antigüedad de 66.700 años de las pinturas rupestres de la cueva de Maltravieso, lo que refuerza la investigación ya hecha pública hace seis años en la revista Science. Es en concreto el Journal of Archaeological Science: Reports la publicación que hace difusión de nuevas pruebas y dataciones en varias fases dentro del programa trasnacional First Art, en donde se trabaja de manera conjunta con la cueva de Escoural, en Portugal.

Tal y como explicaba a este diario el jefe de arqueología de la Junta, Hipólito Collado, se han hecho nuevas dataciones con dos laboratorios diferentes que vuelven a colocar a Maltravieso como referencia del estudio del neandertal, la especie humana más cercana a nosotros. Vivieron unos 300.000 años, hasta que, coincidiendo con la llegada de los humanos modernos, desaparecieron hace unos 35.000 años por motivos que genera un intenso debate e infinidad de ensayos.

El artículo que acaba de ser publicado lo lidera Christopher D. Standish en la Universidad de Southampton. En él se ha aumentado el número de dataciones que ya existían, en concreto son cuatro paneles en total. Indica que no solo hay una mano neandertal en Maltravieso sino que hay varias manos diferentes que son de esta época.

Las investigaciones aportan luz a un debate antiguo ya que hace pensar que los autores de esas pinturas no son los sapiens como hasta ahora se ha defendido, sino los neandertales, una especie que todo apunta a que contaba con capacidad para expresar símbolos. Las líneas que separan las especies se van atenuando en función de los descubrimientos.

El tema es apasionante, y también lo es saber que Cáceres tiene mucho que ver en este hallazgo. Del estudio se extrae que hay diversidad cronológica y que las pinturas se realizaron en distintas épocas, desde el Paleolítico Medio hasta el Holocento. Refuerza la idea de una continuidad cultural entre los neandertales y los humanos modernos.

En el horizonte de Maltravieso está la construcción la réplica que se va a crear junto a la cavidad, adjudicada en febrero y con un presupuesto de un millón y medio. Va a reproducir algo más de la mitad de la original e incluirá las galerías más importantes. La idea es poner en el mapa para el turismo este recurso fuera de los circuitos más habituales en donde brilla, sobre todo, la identidad de la ciudad antigua.

A pesar de los planes que hay para Maltravieso el conocimiento que de ella tiene la sociedad cacereña no es generalizado. Actualmente solo un pequeño centro de interpretación en las proximidades de la cueva original muestra los detalles de esta cavidad que puede representar, aunque suene pretencioso, el origen de todo lo que somos.

Participantes en la primera visita de la cueva de Maltravieso. HOY

El régimen de visitas mejorará para adaptarlo al turismo

En marzo de 2019 se anunció que, por primera vez, la cueva de Maltravieso podría recibir visitas guiadas, un programa experimental que duraría un año.

La pandemia atravesó este proyecto y las visitas se suspendieron a finales de 2022. Se inauguró una etapa en la que se llevó una política restrictiva respecto a la anterior, y en lugar de 12 personas a la semana se procedió a una reducción a cinco, ya que se comprobó que los parámetros precedentes eran negativos, con contaminación microbiológica, contenido de C02 y florecencia de hongos.

Hace un poco más de un año, en septiembre de 2023, se anunció que las visitas continuarían de la manera establecida, para lo cual hay que coger cita en la web www.visitaescouralmaltravieso.com, en las que puede realizarse una única solicitud por persona. Se realiza después un sorteo para establecer quiénes son las cinco personas que pueden visitar esta cueva cada viernes, excepto los festivos, guiados por técnicos expertos en la materia.

Tal y como ha explicado a este diario el jefe de arqueología de la Junta de Extremadura, Hipólito Collado, el régimen de visitas mejorará para adaptarlo al turismo y se podrá elegir el día para conocer de cerca esta cueva que alberga las pinturas rupestres mas antiguas del mundo.

Alrededor de 200 personas al año visitan la cueva de Maltravieso a lo largo de los 90 metros de una visita que se extiende durante una hora. A la cueva se entra con un mono desechable y calzado cómodo.

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